Mientras se proyectaba la película Chicago venía la sorpresa, con actores reales reproduciendo algunos de los números sobre el escenario con bastante acierto y gracia. Para cerrar el evento, algunos números más y un fin de fiesta por todo lo alto. Muy buena idea para hacer de una película un gran espectáculo, y que volvamos todos a ver el cine donde mejor se ve, en cines.
