Todos hemos disfrutado en algún momento de nuestras vidas de un buen par de horas en el cine, contemplando nuestro filme favorito. El cine ha ido evolucionando con los anos, llegando hasta extremos inimaginables.
La historia del cine se inició en París, el 28 de diciembre de 1895 y desde entonces, la tecnología ha cambiado la forma en que nos cuenta una historia este ¨pequeño¨ espacio.
Hoy en día, es común escuchar palabras como IMAX o 3D, formatos en los que, acompañados de las inevitables palomitas, nos permiten disfrutar de una gran calidad de imagen y sonido.
Hasta aquí todo parece normal, pero ese es el problema, el ser humano no es un ser normal, siempre tiene que estar creando algo nuevo, algo revolucionario, aunque muchas veces esto entre en el término de locura y no de ¨revolucionario¨.
Entonces es cuando se crean los cines por encima de las tres dimensiones conocidas por nuestros sentidos. No me refiero a las dimensiones físicas en las que vivimos o los universos paralelos, me refiero al nuevo sistema de clasificación de los cines de más alta calidad.
El cine 4D, este es una especia de cine, que además de poder disfrutar de todo el show en 3D con nuestras amadas gafas, nos ofrecen una serie de sensaciones para engañar a la mente humana, y hacernos creer que estamos sumergidos totalmente en el drama del filme.
Esto incluye por ejemplo, que la silla en la que nos encontremos sentados comience a vibrar en los momentos de más tensión, ya sea por el choque de dos vehículos, o la caída en picada de un avión. También se incluyen efectos, como son los pequeños chorros de agua y viento, que son disparados con total precisión hacia nuestro cuerpo, para adaptarlo al clima que se está rodando en la pantalla grande.
Efectos de humo, luces e incluso olores especiales, como es el caso de la más reciente película de Iron Man, en la cual usted podía oler el traje del superhéroe.
Ni siquiera la tan afamada Avatar se pudo escapar de todo este mercado. Esta fue transmitida en Sur Corea en 4DX, si, otro nuevo formato. Esta te permitía conocer el olor y las vibraciones de las explosiones, e incluían en el espectáculo una serie de luces laser, para dramatizar más aún la trama.
Preparar un cine para la reproducción de este formato toma alrededor de un mes. Por supuesto, le costara a su bolsillo unos 8 dólares más para obtener el ticket, o lo correspondiente a la moneda imperante en su país.
Pero esto no es todo, esto no puede finalizar aquí. Ya se esta hablando de los cines 5D, 6D 7D y no se cuandas D´s más. Pues sigamos viajando por las dimensiones del entretenimiento, lo que sea por vaciar un poco mas su billetera, yo por mi parte, no me causa mucha emoción regresar a mi casa con la ropa mojada y mi cuerpo traumatizado debido a tanto movimiento ¨sillistico¨.
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