Fernando Lalana. No he encontrado
foto de José María Almárcegui
Revista Cultura y Ocio
Título: El Círculo HerméticoAutores: Fernando Lalana y José María AlmárceguiSaga: libro autoconclusivoEditorial: San PabloFecha de publicación: Abril 2009El profesor Celíades Montorio, soltero, sesenta y siete años, aparece asesinado en un palacio del casco viejo de Zaragoza, con un compás clavado en el ojo izquierdo. Pertenecía al Círculo Cima, un grupo de jubilados amantes de la Historia, empeñados en elaborar una extraña enciclopedia sobre algunos de los grandes sabios olvidados de la Humanidad. Todo parece indicar que se trata de un crimen ritual. El inspector Germán Bareta será el encargado de la investigación, en la que jugará un papel inesperado y determinante Nicolás Martín, ahijado del policía, a punto de entrar en la Universidad y con el corazón dividido entre Malva, la chica de su vida, y Desdémona, la inquietante bibliotecaria de los ojos de color violeta... Este es el último verano antes de la Universidad. Quizás por eso sea distinto. Para Nicolás, no será un verano fácil. El cadáver de un anciano asesinado aparece, pero eso no es todo: tiene un compás clavado en el ojo. ¿Se tratará de un ritual? El policía al que asignan el caso es el padrino de Nicolás, así que entre unas cosas y otras, el joven termina investigando ese asesinato... y los que vienen a continuación.Además, Nicolás tendrá que decidir entre su amor de toda la vida y una chica que acaba de entrar en su vida. Malva o Desdémona, Desdémona o Malva. Este promete ser un verano muy movidito.Nuestro protagonista es Nicolás, o al menos uno de ellos ya que la historia tiene varias "subtramas". Es un joven bastante sencillo, al que ni he amado ni tampoco odiado. Pero no me ha dado más. Mi personaje favorito ha sido el inspector Bareta porque, llamadlo X o llamadlo Y, los policías siempre son muy majos y en esta novela no iba a faltar. Por supuesto, también está el "malo" de la historia, malo que en este caso es un asesino cuyo metódico plan me dejó pasmada >o< Cualquiera diría que no es un asesino y sí un matemático chiflado (aunque por lo que vosotros sabéis, podría serlo, no os digo yo que no).