Fue imprescindible para construir la Estatua de la Libertad o el Partenón de Roma, y, después de presentarse como tendencia del diseño mundial en el 54º Salón Internacional del Mueble de Milán, está también cada vez más presente en la decoración de interiores, creando un ambiente neoyorkino y cálido, combinando con el cuero, la arcilla o el hormigón, y especialmente valorado por ser reciclable y sostenible.
Que se lo digan a Álvaro Catalán de Ocón, uno de los diseñadores españoles más internacionalizados, que ha manejado el cobre en proyectos lumínicos como su emblemática lámpara La Flaca, sus candiles o su Rayuela. Todos ellos, basados en el espíritu humanista de este artesano del siglo XXI que obvia lo superfluo y acentúa lo imprescindible, y se recorre el planeta en busca de los mejores diseños y materiales.
Con él, y con la diseñadora Ruth Uve y el saxofonista Ariel Brínguez (porque todos los instrumentos de viento tienen aleaciones del cobre en su ADN), ha colaborado el Instituto Europeo del Cobre para divulgar las
propiedades de este material, tan oculto en tuberías o cables, pero tan presente en nuestro entorno. El pasado jueves 17 de noviembre, el estudio de Catalán de Ocón se convirtió por un día en La Casa del Cobre, una pop up
informativa donde estos cuatro protagonistas charlaron de las propiedades de este fascinante material.
El Instituto Europeo del Cobre (European Copper Institute - ECI), fundado en Reino Unido en 1996 y con sede central en Bruselas desde 1998, surge de la asociación entre las principales compañías mineras del mundo, las empresas fundidoras y semitransformadoras - representadas por la International Copper Association -, y la industria europea del cobre. ECI también forma parte de Copper Alliance, una red internacional de asociaciones patrocinada por la industria del cobre, cuya misión común es ayudar a desarrollar y defender los mercados del cobre, en base a sus excelentes características técnicas y a su contribución a una mejor calidad de vida.
www.copperalliance.es