El color mostaza resulta una buena opción en la decoración de interiores

Como bien es sabido, la mayoría de modas vienen y van. Sin embargo, algunas se quedan finalmente entre nosotros. Un buen ejemplo lo encontramos en el color mostaza, que desde hace algunos años está teniendo bastante protagonismo en lo que a decoración de interiores se refiere. Y todo apunta a que seguirá teniéndolo los próximos meses. Esta tonalidad de amarillo transmite energía y vitalidad, además de potenciar la luminosidad y la calidez. Además, al ser menos brillante que el amarillo convencional, da mucho más juego a la hora de decorar.

El color mostaza es perfecto para decorar cualquier estancia del hogar, aunque es especialmente recomendable para espacios en los que se requiere transmitir calidez como, por ejemplo, el salón.

Características del mostaza

El mostaza es un color que tiene algo de marrón y de dorado. Por eso, no resulta tan brillante como el amarillo, aunque sí que comparte con él algunas ventajas, como su luminosidad, calidez y alegría. Gracias a sus características, resulta mucho más versátil que el amarillo, que es más adecuado para estaciones como la primavera y el verano, mientras que el mostaza encaja en cualquier época del año. Eso sí, es importante tener en cuenta que también es descarado e intenso. Además, conviene saber que tiene un matiz mostaza, ya que esta tonalidad estaba muy de moda en los años 70. Debido a que aporta luz y calidez, es ideal para el salón, el espacio más social de la casa, en el que se suele recibir a los invitados y, también, en el que se disfruta la mayor parte del tiempo libre cuando se está en casa. 

Cómo usar el mostaza en el salón

Como se puede imaginar, existen muchas formas de utilizar el color mostaza en el salón. Lo más habitual es que solo está presente en pequeñas pinceladas. Por ejemplo, se puede apostar por este color para alguno o todos los textiles de la estancia: cortinas, alfombras, cojines, plaids… También hay mucha gente que opta por pintar alguna de las paredes de color mostaza, introduciendo en la estancia algún que otro complemento, textil u objeto decorativo en este color. Lo que no es tan común es pintar todas las paredes de este color, ya que el resultado podría resultar demasiado pesado al tener un gran poder visual. Tampoco es muy habitual apostar por piezas de mobiliario mostazas, aunque una buena opción puede ser introducir un sofá o sillón en este color.

Los mejores colores para combinar con el mostaza

Son muchos los colores que combinan con el mostaza, aunque el blanco puede que sea el idóneo, ya que mezclando ambos colores se pueden lograr salones tremendamente cálidos y luminosos, además de visualmente más amplios. Por otra parte, es importante tener en cuenta que en estos momentos está de moda combinar el mostaza con el gris. Además, puede quedar genial con cremas, tierras, marrones, negro, verdes y granates.

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