Título: El color púrpura
Autora: Alice Walker
Editorial: Plaza & Janes
Número de páginas: 256
ISBN: 9788401491153
Precio: ?
Puntuación: 8,5
El Color Púrpura, cuenta, a lo largo de distintas décadas, la intensa vida de Celie, una mujer de la América rural del Sur. Forzada a casarse con un hombre brutal. Celie se retrae y comparte su desgracia sólo con Dios. Celie sufrirá una transformación gracias a la amistad que comparte con dos extraordinarias mujeres, adquiriendo la autoestima y la fuerza que necesita para perdonar.El color púrpura nos presenta a Celie, quien al principio del libro es una chica de 14 años negra que vive en América del Sur. Aunque no dice época, he leído varias reseñas e información y debe de estar situado a principios del siglo XX, cuando ya se había abolido la esclavitud, pero el racismo era el pan de cada día.
Sí, este un libro sobre negros que trata de denunciar el racismo, está claro. Pero más que eso, para mí ha sido sobre todo un libro feminista, que trata de denunciar, principalmente, el machismo. Celie es negra, pero también es una mujer. Así que imaginaos cómo debía de ser su situación.
Este libro es muy duro desde el minuto uno. Ya en las primeras páginas, vemos cómo la situación de Célie es desesperada: su madre ha muerto, y su padre la viola repetidas veces, dejándola embarazada dos de ellas y después vendiendo a sus hijos. Además, al cabo de un tiempo su padre parece que empieza a interesarse por su hermana pequeña, Nettie, a la que Célie adora.
Al poco tiempo, Célie es forzada a casarse con Albert, un hombre todavía más brutal que la maltrata física y psicológicamente y que la trata como si fuera su criada, y es separada de su hermana Nettie, a la que no vuelve a ver en años.
Puede que con esta premisa os echéis para atrás porque penséis que va a ser demasiado duro. Sí, lo es, pero lo que más me ha gustado de El color púrpura es que también está lleno de esperanza y de felicidad, no todo es horrible en este libro.
El libro está contado en forma de cartas de Célie a Dios, narrándole todo su sufrimiento y su día a día. Hay numerosos saltos temporales y de pronto, de una carta a otra han pasado cinco, diez, veinte años, cosa que me despistaba un poco.
Me sorprendió que hubiera tantos personajes femeninos fuertes, la verdad. Esperaba ver una realidad más deprimente, con la mayoría de las mujeres que aparecieran sometidas al hombre, y me he encontrado con un buen elenco de mujeres que simplemente hacen lo que les viene en gana.
Primero mencionar a Célie, que sufre una evolución notable, cosa que me encantó. Aunque durante gran parte del libro la vemos sumisa y apocada, también protagoniza algunas escenas que te hacen querer levantarte de la silla y aplaudir.
Después está Shug Avery, la amante del marido de Célie. Es una cantante negra que fuma, viaja, bebe, conduce, se acuesta con quien le da la gana y no deja que nadie le tosa. La influencia de este personaje sobre Célie es inmensa, y para bien.
También otros personajes como Sofía o Mary Agnes demuestran en numerosas ocasiones que no se dejan achantar por nadie y que son dueñas de su vida.
Lo último que quiero mencionar, y que también me sorprendió muchísimo, es la relación que hay entre las mujeres en El color púrpura. Durante todo el libro muestran una camadería y un sentimiento de hermandad que pocas veces he visto en la vida real, lo cual es muy triste. Célie y Shug desarrollan una relación preciosa, y eso que son mujer y amante del mismo hombre. Lo mismo pasa con Sofía y Mary Agnes, mujer y novia respectivamente del hijo de Albert, Harpo. Aunque no se lleven precisamente bien, ante el machismo pelean codo con codo y se defienden como leonas. Me encanta.
En resumen:El color púrpura me parece un libro imprescindible, de estos que dejan huella y que no se olvidan aún mucho tiempo después de haberlos leído.