Alemania vuelve a formar parte del mundo de los cómics. De un grupo de artistas del este de Berlín nació una nueva vanguardia de cómics alemanes. La simpatía que despierta el cómic en las universidades alemanas promueve de forma determinante el desarrollo de nuevas corrientes. La variedad de temas y estilos en el mundo del cómic es cada vez mayor.Seguir leyendo aquí...
El hecho de que Alemania vuelva a formar parte del mundo del cómic es gracias a la unificación de la República Federal de Alemania y la República Democrática Alemana (RDA). La parte oriental del país fue la que jugó el papel más importante para el retorno de este género, por lo menos si nos fijamos en el aspecto estético y no en el puramente económico.
Naturalmente, antes de 1990 ya había algunos reconocidos dibujantes alemanes de cómics. Desde Matthias Schultheiss o Ralf König, artistas de renombre internacional hasta Walter Moers o Rötger Feldmann, alias "Brösel" (miga), autores de historias nacionales de éxito, pasando por Hannes Hegen y Rolf Kauka, protagonistas en los años 50 y 60: todos ellos adoptaron estilos y maneras de narrar de otros países, ya sea influencias provenientes de la revista humorística "Mad", de Walt Disney, fundada en 1950, de Francia o del movimiento "underground" americano.