El condenado

El

Condenado

Un día en un pueblo desconocido estaban pasando por sus épocas más drásticas de mucha lluvia, no había pasto, el lugar donde dormían era charco empezaban a morir las ovejas por mucho frió  para la tranquilidad de sus animales tenían que ir al campo a 5 horas de distancia caminando hacer su choza y pasar la temporada.

Por este motivo maría tenía que irse al campo ella con sus 4 hijos Julián, Mauro, Sarita y David el menor de todos tenía solo 5 años ellos tenían 50 ovejas ,13 vacas ,10 cerdos 4 asnos, dos perros a quien los llevo pero tuvo que  encargar sus 10 gallinas, sus 30 cuyes, sus 3 gatos a su vecina que se quedaba cuidando junto a su papá quien estaba enfermo necesitaba de cuidados ella tenía 20 ovejas que encargo a maría por ello Eva tenía que quedar con el cuidado de los otros animales pequeños a manera de favores.

Esa mañana a las 3 de la mañana salieron para el campo con todas sus cosas cargado en sus asnos ya en el campo descargaron y se propusieron hacer su choza pero el señor Jacinto les dijo que ese lugar ya estaba ocupado y que se buscaran otro lugar donde hacer su choza así que se fueron otro lugar tanto que no se dieron cuenta que se habían alejado ahí hicieron su choza sin problemas a los dos días llego su otra vecina a instalarse a su lado así que ya no estaba sola todos los días cocinaban estaba todo tranquilo  pero no sería para siempre.

Un día ya tarde ya eran las 6 de la tarde cuando un señor apareció vagando por su choza era un señor no tan mayor de unos 40 años este era bastante flaco pero nada que hiciera que fuera raro este hombre indico que era aventurero y se había perdido que por favor le alojara por una noche en su choza a esto maría acepto sin presagiar lo que más tarde ocurriría.

Más tarde ya estaban cenando maría había preparado una sopa de harina sirvió a todos y le sirvió también al hombre este empezó a comer vorazmente su hijo menor le dice al oído mami mira tiene un hueco en el cuello ella se rió y le dijo ah seguro se le derramo no te fijes.

Al finalizar la cena maría se dio cuenta que no hay agua y dice mañana va estar ocupado mejor voy de una vez Julián, mauro acompáñenme a esto mauro responde mama yo no voy a poder quizá este hombre le hace algo a mi hermana le dice en voz baja tienes razón dice maría mejor quédate solo voy con Julián total solo son dos baldes.

El hombre se levantó y se dirige a maría diciéndole no pasa nada vaya no más tranquila mira aquí te presto mi hueso este me acompaña a todo lugar no me pasa nada ella de curiosa le pregunta hueso de que es ah es de un perro que murió y solo me hice quedar su hueso y me siento en compañía, bueno está bien ya regresamos entonces ya en el camino lejos de la choza el hueso empieza hablar y le dice señora no regreses a tu choza duerme en otro lado tus hijos ya están muerto él se los comerá como me comido a mi yo era un señor de 40 años vivía en huanca con mis hijos pero un día tuve que viajar de noche a otra ciudad en el camino apareció este señor me dijo que me acompañaba a ese lugar y en el camino me ataco comiéndome bueno él tiene mi aspecto en este momento maría se quedó atónita boto sus baldes y corrió gritando hacia sus vecinos les contó lo que había pasado pero nadie le creyó se quedó sentada y llorando abrasando a su hijo ahí apareció su vecina que vivía cerca de su choza ella se lo contó y ella le dijo para irse a la choza de su mama que estaba al final ahí se quedó a dormir quería ir pero no podía porque no sabía qué hacer para defender tenía miedo que le hiciera daño a ella y a su otro hijo, María no pudo dormir toda la noche al día siguiente fue con el primo de su vecina, su vecina y otros más que acompañar a maría  al llegar a la choza encontraron resto de sangre pero no encontró aquel hombre por más que lo busco en su búsqueda solo encontró a su hijo menor que se había escondido junto a la ovejas pero efectivamente se había comido a sus hijos mauro y sarita quienes no pudieron escapar.

El pequeño asustado le cuenta a su mama ese hombre apenas te fuiste nos dijo que tenía más hambre le dimos comida pero no nos aceptó persiguió a mi hermano mientras eso yo me fui con las ovejas mi hermana se metió donde las vacas pero la alcanzo y se la comió después empezó a llamarme fingiendo ser mi hermana casi caí la primera pero vi como él se comió así que no salí ni toda la noche hasta que ese hombre se fue empezó a gritar muy feo y cada vez se alejaba pensé que estaba fingiendo por eso no salí hasta ahora.

María dijo no voy a estar ni un segundo más aquí su vecina y sus primos también se pusieron desarmar todo cargaron en sus burros y se regresaron a sus casas.

Su vecino Jacinto se estaba riendo esas locas se volvieron… mejor hay más espacio para nuestros animales.

Después de unas horas llego el atardecer Jacinto sentado en la puerta de su choza se puso a pensar en que si era verdad o no pero se dijo ah que estoy pensando mujeres tenían que ser miedosas.

Ya se cerró la noche todo oscuro en ese momento aparece una señorita muy bonita de estatura alta, delgada pero con un aspecto muy feo, en la puerta de su choza.

El señor se puso a mirar el enorme trasero que cargaba de pronto sintió un poco de miedo porque su aspecto le recordaba a lo que horas antes su vecina le había contado.

En ese momento se puso a observarla detenidamente pero ya era demasiado tarde ella se convirtió en un hombre muy flaco y feo Jacinto quiso gritar estaba gritando en modo silencioso en ese momento este hombre se le lanzo al cuello y se lo comió.

Más tarde va a las otras chozas empieza a comer a todos los niños y adultos presentes todos corres despavoridos sin saber a dónde porque la oscuridad no les dejaba ver pero muchos no lograron escapar siendo presa de aquel condenado.

A la mañana siguiente bastante de madrugada llegaron varios habitantes al pueblo gritando y contando todo lo que había pasado entonces el alcalde del barrio decide organizar una junta para ir a buscar al condenado. Pero nadie quiso acompañarlo así que el decidió que vayan todos los hombres convenciendo a cada uno de ellos.

Se pusieron en marcha 30 varones desde los 20 a los 50 años ya cerca todos tenían mucho miedo de lo que podría pasar pero ya cerca se dieron cuenta de que no había nadie en las chozas supusieron que se los había comido entonces decidieron buscar toda la zona en la búsqueda encontraban algunos niños, adultos que de suerte se escondieron y él no se los comió.

Al pasar del tiempo ya no encontraban nada pero siguieron buscando hasta que uno de los ciudadanos asustado volvió del fondo de la quebrada temblando y diciendo que había muchos condenados durmiendo en esa cueva.

Entonces los ancianos propusieron hacer prender candela con la idea de que se vayan como la creencia dice que les da miedo el fuego así que pusieron en marcha el plan en esos momentos prendieron fuego alrededor y se escaparon a la loma para mirar o escapar si eso sería el caso.

Al pasar de unos minutos empezaron a gritar con unas voces roncas que daban temor, los condenados empezaron a salir de su cueva pero no podían escapar estaban cercado de fuego a medida que avanzaba el fuego los alcanzaba cada vez más hasta que los llego atrapar y quemarlos a todos.

Así todo este terror acabo para el pueblo por momento hasta que lleguen más condenados buscando refugio en los campos silenciosos.

Gracias por leerme y espero sus comentarios,criticas.