Mamá coneja está sentada en la cama junto al conejito Fito intentando que éste se duerma, pero él no para de dar vueltas porque no puede dormir.
Entonces mamá coneja para que pueda conciliar el sueño empieza a leerle un cuento:
Un grupo de animalitos se cepillan los dientes, se ponen el pijama y en fila entran en un barco donde acostumbran a dormir.
En el barco, mecido por las olas, duermen tranquilos como si estuvieran en una cuna.
Acunados por las olas, su estado de relajación es tan placentero que cuando alguna preocupación quiere llegar a sus mentes, las dejan pasar como si fueran olas pasajeras sin detenerse en ellas…
Con este lindo cuento el conejito Fito se quedó dormido plácidamente sin ningún tipo de ansiedad.
Mama coneja cierra el libro, apaga las luces y lo deja dormidito bien abrigadito.
Autora: María Abreu
Cuando me acuesto, me duermo enseguida, porque sólo tú, mi Dios, me das tranquilidad. (Salmos 4:8)