Si por algo sufren los estudiantes es que olvidan las lecciones que sus maestros les compartieron, esto es un martirio para todo estudiante, desde el niño que comienza el preescolar, hasta el universitario que está realizando un posgrado, tratamos en toda nuestra educación escolar con este problema, lo curioso es que llegamos a finalizar nuestros estudios y siendo francos olvidamos muchas de las cosas que pasamos años estudiando.
¿Porque olvidamos lo que en un principio nos costó tanto esfuerzo en aprender? hay muchas razones, de las más importantes podemos destacar que lo ya no ponemos en práctica comenzamos a olvidarlo, lo que aprendemos porque nos obligaron a ello no lo aprendemos ni lo hacemos bien y aquello que no nos motiva terminamos por perderle interés.
No debemos sentirnos brutos porque olvidamos cosas que por años nos inculcaron en la escuela, eso es normal y en cierta forma hasta bueno pues muchas de las cosas que trataron de inculcarnos eran cosas que pretendían volvernos una persona común y corriente que no destaque en medio de esta sociedad de masas ingenuas, nuestra mente desecha la información que cree que no es importante, todo para que nos enfoquemos en lo que sí es importante y eso es en lo que nos ayude a sobrevivir y lo que nos satisface espiritualmente.Dejemos de hablar de lo que olvidamos, hablemos de que es lo que necesitamos para que lo aprendamos lo recordemos de raíz:
- Todos sabemos que el cerebro recuerda más los momentos en los que corrimos riesgos por lo cual si queremos aprender algo debemos correr riesgos, dejar de vivir a la segura.
- Si pretendemos aprender algo que sabemos que no nos llama la atención, es mejor dejar de engañarnos a nosotros mismos, pues lo único que despierta interés de aprendizaje es lo que nos llama la atención.
- Practicar es lo que hace que un conocimiento no se olvide, esto es un hecho innegable.
¿Cómo conservamos un conocimiento de raíz? pues concentrémonos en lo que amamos y deseamos, en lo que nos satisface eso es lo más básico, corramos riesgos, quien no corre riesgos jamás evoluciona y pues por último y por lógica no dejemos de poner en práctica lo aprendido.