El Consejo de Ministros de los hermanos Marx.

¡Si ya me decía Paco que con este Gobierno no nos daría tiempo a aburrirnos! Le dí la razón porque jamas se equivoca pero no pensaba que sería tan pronto tanto como que todavía no ha empezado a andar y la oposición no se ha dado cuenta de que lo es y ya nos ha puesto la mosca detrás de la oreja.

Andábamos Paco y yo contando la lista del Gobierno y en serio, cuando vimos que había nada más ni nada menos que 23 se nos cayó el café de la taza. 18 Ministerios con sus carteras de piel buena cada vez más grandes con la idea de que quepa el nombre entero del

Ministerio que les toca y 4 vicepresidentes, con sus Secretaría de Estado sus asesores, amigotes y otros asalariados (es inevitable, el chanchullo está en el ADN de la especie humana incluso antes de que bajásemos de los árboles) veremos si después de pagar a tanta gente nos queda un euro para repartir entre todos nosotros. En resumen, decíamos que la primera noticia que tenemos del ejecutivo ya es un disgusto, Tropecientos ministros!. Habrá que mandar comprar una mesa nueva porque en la que tenemos no cabe tanta gente sentada en un Consejo de Ministros, eso va a parecer más el inolvidable camarote de los Hermanos Marx de “Un día en la ópera” que un cónclave serio. Y lo que es más grave, si te vas de cena con los amigos, sois 10 o 12 en una mesa y ya no os escucháis los unos a los otros veremos si con tanta gente son capaces aprobar un solo Decreto que nos ayude un poco en nuestras miserias.

Lo siento pero me ha decepcionado bastante porque parece que Sánchez se ha dedicado más a “añadir” gente de Podemos y ponerle contrapesos que a hacer un gobierno pensando

en los que de verdad necesitan un ejecutivo que funcione porque ya me explicarán eso de tener CUATRO vicepresidencias como se conjuga con la contención del gasto y la practicidad en el día a día. No se la impresión que te dará pero a mí me parece que está tan equilibrado que por mucho tiempo que se tire de la cuerda, primero se romperá que se decantará hacia un lado u otro. Me gustaría equivocarme pero mal lo veo.

Y por si la cosa fuese poco, me asusta pensar me asusta pensar que pueda estar yo de acuerdo con una opinión de la derechona (igual me estoy haciendo viejo) pero ya me dirás

tu si trasplantar a Dolores Delgado del Ministerio de Justicia a la Fiscalía General del estado tiene una apariencia medianamente ética. Puede que Doña Dolores sea una gran Fiscal (que lo es, de eso no hay duda) pero como siempre se ha dicho “la mujer de Cesar ha de ser honrada y además parecerlo” y la apariencia. la verdad, no la veo por ningún lado si queremos mantener aquello de la independencia de los poderes.

Espero de todo corazón equivocarme como siempre pero aunque le demos el justo

beneficio de la duda a este ejecutivo, no se que decirte. Cuando una cosa empieza atragantada remontarlo ya es difícil. Quisiera equivocarme porque creo y tengo ilusión en que por fin se va a hacer algo por los más abandonados, por los que llevan años recibiendo palos. Espero que todo sean manías mías y esta aventura que empieza sea recordada como la mejor vivida en siglos. Ya veremos, el tiempo todo lo resuelve y ya sabemos que el movimiento se demuestra andando.