Revista Historia

El coprolito del Lloyds Bank, una caca humana de museo

Por Ireneu @ireneuc

La Sucursal de la Lloyds Bank

York, ciudad situada al norte de Inglaterra, además de ser conocida especialmente por su jamón, también lo es por tener el curioso honor de ser la ciudad que posee las heces humanas más grandes y mejor preservadas del mundo. No, no es una broma escatológica, es un "adabelardo" humano parecido a un calabacín de a palmo,  que incluso es visitable. Poca coña.
En 1972, en el centro de York, en el barrio de Coppergate, el Lloyds Bank quiso construir una nueva sucursal. La ciudad, una de las más antiguas de Inglaterra, dispone de una gran cantidad de yacimientos arqueológicos que la predispone a encontrar restos históricos a cada piedra que se levante, talmente como una Tarragona o Roma cualquiera. En este caso, las obras que se hicieron dieron de pleno en un afloramiento de época vikinga, por lo que se procedieron a su excavación.

El coprolito del Lloyds Bank, una caca humana de museo

Festival vikingo de York

La parte norte de Inglaterra -lo que hoy sería Yorkshire- había sido invadida por los vikingos daneses durante los siglos IX y X, formando un reino independiente que duró poco menos de un siglo. Los vikingos hicieron de York su capital, a la que llamaron Jórvik y, durante aquella época, uno de los habitantes de la ciudad "descomió" como exige la tradición y el buen tránsito intestinal. Lo que no sabía aquel habitante -no se sabe si era mujer u hombre- es que aquel bate de béisbol se iba a conservar perfectamente y que 1.000 años después los arqueólogos iban a encontrarlo en los futuros cimientos de un banco.
Los restos, que se habían mineralizado y se habían convertido en coprolitos (ver  Coprolitos o las cacas que vinieron del pasado), fueron estudiados por los científicos, los cuales determinaron que aquella persona tenía una dieta a base de carne, pan, cereales, frutas y nueces, pero sobre todo, carne. Los análisis hechos también encontraron huevos de lombrices intestinales en gran cantidad, por lo que llegaron a la conclusión de que tenía una fuerte infestación de estos parásitos (se especula que entre 600 y 2500 lombrices) y que ello tendría que ser fuente de severas molestias para el creador de "aquello".

El coprolito del Lloyds Bank, una caca humana de museo

Excavación en Coppergate

Una vez estudiado, el coprolito fue depositado en el Centro de Recursos Arqueológicos para pública exhibición, siendo la sensación del museo, sin embargo, en 2003, semejante reliquia sufriría un accidente.
En una de las visitas guiadas para escuelas que se hacen regularmente, un profesor estaba enseñando la "alegría" vikinga a sus alumnos cuando ésta se le cayó de las manos y se partió en tres trozos. Por suerte, el pegamento hace milagros y los encargados de restauración de la institución pudieron recomponerlo y volvió a estar visible al público.
En la actualidad el coprolito humano se encuentra expuesto en el Jorvik Viking Centre de York en testimonio fehaciente de que, hace 1.000 años, la gente de la ciudad también hacía sus necesidades como hoy en día.
¡Y qué necesidades!

El coprolito del Lloyds Bank, una caca humana de museo

Una caca humana digna de estar en un museo


Webgrafía


Volver a la Portada de Logo Paperblog