Ya empieza la invasión de corazones. Se acerca el día de los enamorados…Yo no puedo quejarme, porque soy la primera “invasora” del reino con aquellos “Corazones a diestro y siniestro” que publiqué el otro día…Y fue a partir de esos dibujitos que me empecé a plantear algo que, como he visto Googleando, ya es una cuestión comentada con profusión. ¿Por qué utilizamos un corazón para representar el amor? ¿Qué forma es esa? .No se parece en nada a un corazón de verdad…
La importancia del “corazón órgano” viene de lejos. La civilización egipcia, por ejemplo, creía que en el corazón se concentraba el alma y la mente del ser humano. Y para muchos filósofos y pensadores a lo largo de la historia pero, ahora, ya sabemos que la cosa no va así. El corazón es un músculo que bombea sangre al resto de cuerpo y que recibe órdenes precisas del cerebro para hacer todas esas cosas que hace cuando nos enamoramos (desde la aceleración del ritmo cardíaco, hasta el aleteo de mariposas en el estómago).
El cerebro es el que decide si nos enamoramos o no…El que nos pone tristes. El que nos hace estar felices… El corazón, bombea.
Pero, claro, esto lo sabemos ahora. En tiempos remotos, supongo que era uno de los pocos órganos con posibilidad de causa –efecto que se podía verificar empíricamente: latido = vida. Así que se podría entender la importancia del “corazón” para el hombre ( si lo oían, bien. Si no, mal) pero… ¿Por qué el simbolito?
La teoría más extendida de su origen, es la que proviene de la Colonia griega de Cirene (actual Libia). Es en esta ciudad, dónde se creó y se utilizó el símbolo del corazón como lo conocemos en la actualidad y que es utilizado en todo el planeta. Si algo tiene, es que es universal.
Parece ser que el corazón representa las semillas de la planta Silphium, planta cuyo cultivo estuvo muy extendido durante la antigüedad entre egipcios, griegos y romanos remontándose su utilización desde al menos el S.VII a.C.
Se utilizaba para muchísimas cosas: perfume, condimento, analgésico, crece-pelo pero su uso más preciado era como anticonceptivo. Era una forma de disfrutar del sexo con libertad…Por derivación de la condición humana, símbolo directo del amor…
La representación del corazón, pues, viene de una planta. De la semilla de una planta, para ser más exactos.
Otros datos sobre el Silphium.
Según Plinio, se mezclaba un poco de lana suave con la resina del Silphium y se introducía en la vagina para provocar el flujo menstrual. Su secreto, al parecer, residía en el alto contenido de estrógenos que contenía la planta.
El Silphium está extinto hace ya varios siglos. Entre las causas que provocaron su extinción se encuentran, naturalmente, la explotación comercial y los cambios climatológicos. Todos los intentos de cultivarla fuera de la meseta costera de Cirene, fracasaron.
NB 1 : Y si ahora quisiéramos decir “Te quiero”, de verdad y en base a los últimos datos científicos, deberíamos evolucionar y hacerlo así (no vaya a ser que el cerebro, al final, se enfade por usurpación de identidad):
NB 2 : Humor gráfico del gran Montt