Pasaje destacado“Desde el punto de vista bioquímico, el enamoramiento es un proceso que se inicia en la corteza cerebral, pasa al sistema endocrino y se transforma en respuestas fisiológicas y cambios químicos en el hipotálamo mediante la segregación de dopamina.
Recientes estudios en neurociencia han indicado que, a medida que las personas se enamoran, el cerebro segrega en crecientes cantidades una serie de sustancias químicas. Se trata de drogas naturales que quitan el apetito y el sueño, que provocan un estado de permanente excitación. Y que son adictivas.”
Carmen Amoraga es una periodista, política y escritora valenciana (Picanya, 1969) consagrada como una de las grandes voces de la narrativa española actual. Su primera novela fue galardonada con el II Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla (“Para que nada se pierda”, 1997) y después ha conseguido el Premio Nadal (“La vida era eso”, 2014), Premio de la Crítica Literaria Valenciana (“La larga noche”, 2003) y ha sido finalista del Premio Planeta (“El tiempo mientras tanto”, 2010). “El corazón imprudente” es su última novela publicada a finales de 2023. Ha trabajado como columnista en el diario Levante-El Mercantil Valenciano, también ha participado en tertulias en Canal 9, Radio 9 y Punto Radio y hasta junio de 2015 trabajó como asesora de relaciones con los medios de comunicación en la Universidad de Valencia. Como periodista, continúa publicando artículos para diferentes medios.
Los puntos fuertes de la novela
✔ La trama: está ambientada en Valencia y trata sobre dos parejas, Ángel/Tina y José Manuel/Victoria que tras muchos años juntos, felices los unos, infelices los otros, ven peligrar todos los cimientos e incluso el edificio completo de ese amor/no amor, cuando José Manuel y Tina se conocen, primero telefónicamente, más tarde en persona, y sin buscarlo ni pretenderlo, se enamoran en muy poco tiempo.
Las cosas que cambian la vida pasan siempre rápidamente. Conoces a alguien y te enamoras, compras un décimo de lotería y te toca, alguien te hace daño y te rompe el corazón. Naces y mueres en un instante. Todo eso no ha pasado nunca y de pronto, pasa. La vida pasa rápidamente. Parpadeas y has perdido tu oportunidad.
La vida de ambos se convierte en una montaña rusa de emociones, lo que viene siendo estar enamorados: el no conseguir distraerse ni con los hobbies de siempre, el no poder fijar la atención en nada porque se te va el santo al cielo, ni encontrarle sentido a nada que no sea pensar en la persona amada. ¿Quién se lo iba a decir a ellos, que ya tienen cierta edad y que nunca habrían imaginado volver a sentirse tan vivos, tan ilusionados?
Tina había perdido la capacidad de estar en el mundo. Estaba su cuerpo, cierto. Su cuerpo ocupaba el mismo volumen que antes de sentir esa necesidad de escuchar a José Manuel, de tener su atención, de que él llenara sus pensamientos.
Comienzan los encuentros y el sexo furtivo, el miedo a que el otro miembro de la pareja se entere, a equivocarse y que no haya posibilidad de marcha atrás, ese plantearse la opción del cambio, de dar el paso, de salirse del redil perdiendo lo que se tiene sin saber que lo que se pueda tener será mejor o peor a la larga. Dejar o no dejar de hacer lo correcto, pero realmente ¿qué es lo correcto y qué es lo incorrecto? A Tina le surgen las dudas sobre si lo que tiene es o no suficiente por mucho que lo suyo con Ángel sea bueno, tengan una buena vida, una buena relación, y surgen las tentaciones, la posibilidad de solo pensar en uno mismo y no en los demás renunciando a una vida cómoda, para volver a sentirse especial, único, imprescindible.
¿Cómo van a gestionar todo eso que sienten? ¿Serán capaces de coger ese tren que les brinda la vida o lo dejarán pasar? ¿Les merecerá la pena causar tanto sufrimiento a sus respectivas parejas y el riesgo de perderlas?✔ El estilo, la prosa y la historia: la autora escribe bien, sin duda, es hábil narradora y se ve que sabe de lo que habla, pero la prosa tampoco es que sea especialmente bella, aunque sí he subrayado muchos párrafos significativos y bonitos. Amoraga llama a las cosas por su nombre, no se corta, y expresa abiertamente las disonancias entre la mente y el corazón, porque en el amor, en las infidelidades, siempre hay alguien que sufre, y mucho.
Cada uno lleva lo suyo, cada uno arrastra sus golpes y se cura las heridas como puede, y si tiene suerte y cicatriza bien, cojonudo, y si no tiene suerte y la herida le duele cuando va a llover, pues se jode y sigue adelante. Eso hacemos todos. Eso, y apoyarnos en quienes están a nuestro lado. El amor y el odio son muy parecidos, con la indiferencia como el opuesto de ambos. Normalmente hacemos ambas cosas: amamos y odiamos al mismo tiempo a la misma persona.
El estilo es curioso: un narrador omnisciente nos cuenta a los lectores cosas a veces en pasado, a veces en presente y otras veces nos hace partícipes del futuro que los personajes en ese momento aún no conocen
Cuando pase lo que tiene que pasar, cuando Tina le diga: Ángel, tenemos que hablar, se esforzará en comprender lo que le está pasando a su mujer, porque cree que si consigue entender por qué pasan las cosas que pasan, es más probable que lo acepte sin dolor o con dolor razonable. Pero para eso aún falta, aunque tampoco lo sepan.
✔ Los personajes: están bien desarrollados psicológicamente. Primera novela que leo de Carmen Amoraga y me ha sorprendido la profundidad de los mismos, llama la atención la capacidad de la autora para meterse en la psique tanto de los hombres como de las mujeres. Los cuatro protagonistas pasan de los cincuenta y cinco, tienen más pasado que futuro, y este hecho la convierte en una historia de amor distinta y especial, ya que generalmente suelen ser personajes jóvenes los que se encuentran en estas tesituras literarias. Pero no, los temas del corazón, del enamoramiento, no son achacables únicamente a la juventud, porque los maduritos y los viejos también se enamoran.
La pareja formada por José Manuel y Victoria es abierta, tienen una relación de amor libre, de sexo libre, un pacto propuesto por ella, para no ser más que compañeros de viaje, de cama y de casa.
Dame placer, te doy placer. Pero no lo quería. No lo había querido nunca, y él lo sabía. Habían hecho ese trato, vamos a estar juntos, vamos a permanecer juntos, vamos a seguir juntos porque estando juntos seremos más que amigos, más que amantes, seremos aliados y todo nos hará menos daño que por separado, nada más. Así que el acuerdo consistía en estar unidos para hacerle frente a un mundo hostil, sobre todo con ella, que se encontraba de repente viviendo una vida que no era ni suya.
● José Manuel: tiene 63 años, publica artículos en revistas de investigación y es médico de familia en un centro de salud, además de ser el médico de la madre de Tina, de ahí que se conocieron. Está casado con Victoria, que no le ama y él lo sabe, por mucho que él tampoco haya sabido quererla bien. Ha estado dos años en tratamiento psicológico con depresión por haber matado en un accidente de caza a Roberto, el amante y mejor amigo de su mujer. Ha sido absuelto en el juicio, pero ahora tiene la autoestima por los suelos y se cree mala persona. Con Tina ha recuperado su deseo sexual que expiró también con la muerte de Roberto.
Piensa ahora que no ha vivido la vida que él quería vivir y que tal vez podría vivirla con Tina: Estaba contento porque era la primera vez que se excitaba, la primera vez que se corría después de haber matado a Roberto. Había pensado muchas veces que esa gran muerte le había hecho perder las muertes pequeñas que eran los orgasmos y le parecía un justo castigo. Ahora con Tina se siente vivo de nuevo.
● Victoria: tiene 64 años y nunca quiso tener hijos, pero José Manuel que sí la quería o creía que la quería, prefirió, si la opción era dejarla, olvidarse de ser padre. Su padre, el de Victoria, estuvo en la cárcel en la época de Franco y al salir se suicidó tirándose desde el Miguelete sin dejar carta alguna de despedida. Cuando ha conocido toda esa verdad, ha decidido dejar de querer a su madre, que le ha estado mintiendo toda la vida al respecto. Ahora que sabe lo ocurrido, le gustaría encontrarlo y averiguar dónde fue enterrado. Victoria es una persona dotada de una coraza muy rígida, dura, tanto que pareciera no tener sentimientos, muy egoísta, que no quiere a nadie, ni quiere que nadie la quiera. Cae mal, me cayó mal.
La pareja formada por Ángel y Tina sí que era mas o menos feliz hasta que Tina comienza a vivir su desliz y el marido la descubre. Tienen tres hijos, uno de ellos, Carlos trabaja con el padre en su bar y se dedica de forma obsesiva a rescatar a los muertos de las fosas comunes de la Guerra Civil, cuestión para él de dignidad moral.
● Ángel tiene 58 años, es una buena persona, valiente, alguien que no se deja amedrentar por los reveses de la vida. Trabaja y gestiona el bar-restaurante familiar
Han tenido una vida buena, que no les ha dado tregua ni razones para el aburrimiento. No han descubierto la fórmula secreta de la felicidad ni tampoco han patentado un artilugio que les haya hecho ricos o famosos y les permita vivir de las rentas, pero desde que se conocieron no ha quedado hueco para la monotonía.
● Tina, tiene 57 años, y se siente en la plenitud de su existencia. Su romance con José Manuel la hace feliz por un lado, pero no sabe cómo gestionar esa felicidad sintiendo al mismo tiempo tanta angustia por su matrimonio. Es funcionaria y tiene un trabajo que disfruta en el Museo de Bellas Artes. Su hermano Carlos se mató en un accidente de moto y su padre murió poco tiempo después, quedando su madre viuda con cuarenta y ocho años y con el hijo en el cementerio a los cuarenta y seis.
✔ Los temas que se tocan: el prioritario que bucea por debajo de todo y que la autora disecciona meticulosamente es EL AMOR, así con mayúsculas, el enamoramiento que no tiene edad, que todo lo pone patas arriba. ¿Qué es el amor y cómo se manifiesta?
El amor tiene tres etapas. La primera es la lujuria. El impulso sexual continuo y exacerbado. Dura pocas semanas. La segunda es la atracción sexual, inusualmente prolongada en el ser humano. Consiste en un deseo más romántico. Las investigaciones han indicado que esta etapa generalmente dura entre un año y medio y tres años. La última es el cariño. El apego, que implica la tolerancia hacia la pareja. Podría ser que durase toda la vida
Y la fragilidad de las parejas que piensan que su unión será para siempre, hasta que pasa alguien por delante de uno de ellos, alguien que les hace sentir especial, que les saca de la rutinaria vida matrimonial. ¿Es realmente el flechazo una invención de la mente que reescribe el pasado para reforzar la decisión tomada en un momento concreto?
Una pareja es como una planta frágil que puede quebrarse por un golpe de viento o por una mañana que amanezca más fría de lo habitual.
Me gustaría aclarar que, en contra de lo que pudiera parecer, no estamos ante una novela romántica al uso, no me gusta ni suelo elegir como lectura ese género. “El corazón imprudente” es una novela sobre el amor conyugal, de pareja, sobre los errores y los aciertos que se pueden cometer, sobre las segundas oportunidades que la vida brinda para ser feliz, sobre ese tren que a veces pasa delante de nuestras narices y la valentía necesaria para subirse en él y decidir romper con todo, persiguiendo la felicidad de uno mismo a costa de la infelicidad del otro, desprendiéndose de la culpa, de la maldita culpa.
La separación más grande del mundo no era la que dista entre ciudades o continentes, sino la que media entre la vida que quieres y la vida que tienes.
No todo el mundo es capaz de echarle valor a la vida para coger ese tren y decidir comenzar de cero, hay quién elije seguir con lo que tiene que tampoco está tan mal, ¿realmente es eso cobardía? ¿Es el miedo que lo llena todo y no deja espacio para el amor, lo que no nos deja tomar elecciones conscientes entre dos opciones válidas? ¿Es el miedo o la pereza lo que nos impulsa a no modificar el rumbo y a seguir el camino que otros decidieron o que decidió el destino? Porque está claro que no todos los corazones están hechos para amar de forma imprudente, ni para aceptar los cambios que a veces la vida propone y dispone. También pulula por ahí el tema de la memoria histórica, de la memoria democrática, de ello se ocupa Carlos, el hijo de Ángel y Tina
Mi hijo mayor se dedica a la arqueología forense y sobre todo trabaja temas de memoria democrática —le dijo Ángel—. Puedo preguntarle qué puedes hacer para localizar su tumba, si es que hay algo que se pueda hacer.
Resumiendo: “El corazón imprudente” es una novela intensa, que plantea de forma muy acertada y sin tapujos temas relacionados con la vida en pareja, con el amor y el desamor, los celos, la infidelidad, las nuevas oportunidades para ser feliz que la vida ofrece sin importar la edad.
El amor es una maravillosa flor, pero hay que tener el valor de ir a buscarla al borde de un horrible precipicio.
Os recomiendo esta novela? Por supuesto, por varios motivos: por todos los puntos destacables que os he contado arriba, pero también porque aunque la empecé con cierta reserva, consiguió atraparme por completo, la devoré en poco tiempo, y porque es una historia muy cercana ¿a quién no le ha pasado algo así alguna vez en su vida, o no conoce a alguien que se haya visto en el dilema de hacerle caso a la cabeza o al corazón cuando ambos te hablan en idiomas diferentes? ¿quién no conoce a alguien que haya sufrido un enamoramiento inesperado que le haya trastocado su vida entera? Inevitable preguntarse si ignorar lo que te grita el corazón no se acabará pagando caro en el futuro.
Mi nota esta vez es la máxima, para variar, dicho sea irónicamente: