El Cuarto Camino , el Recuerdo de Si Mismo

El Cuarto Camino

El Cuarto Camino es una doctrina metafísica, cosmológica y filosófica introducida  en Occidente por George Gurdjieff y Piotr Ouspenski . Se basa en la creencia de que el ser humano necesita de un sistema para llegar a despertar la conciencia a través del autoconocimiento, la atención hacia uno mismo y el entorno, ejercicios, danzas sagradas y , sobre todo , el “ recuerdo de sí mismo “ .

Gurdjieff fué un maestro espiritual armenio que en sus viajes por Asia formó un grupo de “ buscadores de la verdad “ . Tras estudiar diversas tradiciones filosóficas y espirituales orientales, como el budismo tibetano, el sufismo, el hinduismo y el cristianismo esoterico, formuló la doctrina del Cuarto Camino , que hunde sus raices en ellas.

El cuarto camino propone trabajar sobre el intelecto, las emociones y el cuerpo fisico a los discípulos que lo emprenden.

El Cuarto Camino y las grandes religiones.

Según Gurdjieff , existen tres caminos tradicionales para acceder al despertar de la conciencia: el camino del faquir, el camino del monje y el camino del yogui. Estas vías simbolizan respectivamente, el hinduismo, el cristianismo y el budismo y las tres exigen apartarse del mundo.

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El Cuarto Camino, por el contrario, permite a las personas mantener sus responsibilidades y esquemas cotidianos, sin retirarse del mundo. Aunque Gurdjieff fue el primero que utilizó la expresión “ Cuarto Camino” para denominar el conjunto de sus enseñanzas sobre la priscología del hombre y las posibilidades de su desarrollo, la idea de un cuarto camino se encuentra ya en algunos textos de la antigua alquimia europea que hacían referencia a una búsqueda interna que trascendía los tres grandes caminos de Occidente durante la Edad Media: el Judaismo, el cristianismo y el Islamismo.El concepto de un cuarto camino está presente en todas las Corrientes esotéricas de estas grandes religiones, que sentían la necesidad de remontarse a las raices espirituales para hallar el Corazón común de las tres tradiciones.

Teoría y Práctica del Cuarto Camino

Actualmente, las escueles del Cuarto Camino afirman que existe un camino para cada tipo de persona, cuyo verdadero sentido consiste en encontrar en uno mismo la parte que había olvidada de si, es decir, despertar del sueño, de la mal llamada conciencia de vigilia en que vivimos, que no es más que otra forma de sueño, según Gurdjieff.

El trabajo interior sobre uno mismo que propone El Cuarto Camino parte de la base de que la conciencia tiene grados observables para cada uno en sí mismo.

. Primero está la conciencia de la duración : cuánto tiempo ha estado uno consciente ?
. Segundo , la frecuencia de aparición : cuántas veces se ha llegado a ser consciente ?
. Tercero, la extensión : de qué era uno consciente ?

A partir de estos grados, podremos comprender la idea de una posible evolución de la conciencia.

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El discípulo del Cuarto Camino escala esfuerzos conscientes que activan los aspectos más elevados de sus tres centros: mental, emocional y físico o instintico-motor. Estos aspectos se desarrollan mediante la atención, la observación de uno mismo, la no identificación, la consideración de los otros como uno mismo y el recuerdo de sí.

El término “ trabajo” expresa el empeño por volverse consciente de uno mismo y del entorno, y está intimamente ligado con mantener esa actitud durante la práctica de los ejercicios.

Ejercicio para Recordarse a sí mismo .

La expresión “ recordarse a sí mismo “ describe esos momentos durante los cuales pensamientos, sentimientos y sensaciones físicas están en una relación consciente y armónica, es decir, integrada.

Gurdjieff decía que un problema central en la vida moderna es que la gente no se recuerda a sí misma. Sus enseñanzas intentaban proporcionar las condiciones necesarias para acceder a esos momentos con más frecuencia, y uno de los métodos para conseguirlo era la práctica del ejercicio “ Yo Soy “ .

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Al pronunciar  la palabra “ Yo “, el alumno debe tomar conciencia de sus sentimientos y al decir “ soy “ hacer lo mismo con sus sensaciones. Los alumnos deben practicarlo al menos una vez cada hora.

Este ejercicio, como la mayoría de los propuestos por Gurdjieff , no tiene sentido fuera del contexto que se da en la relación maestro-alumno . Los discípulos del Cuarto Camino insisten en que el sentido interno de sus enseñanzas sólo puede transmitirse a través de la tradición oral.

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