El cuento de la criada, Margaret Atwood

EL CUENTO DE LA CRIADA, MARGARET ATWOOD | 1985 | DISTIOPÍA| SALAMANDRA | 416 PÁGS.Amparándose en la coartada del terrorismo islámico, unos políticos teócratas se hacen con el poder y, como primera medida, suprimen la libertad de prensa y los derechos de las mujeres. Esta trama, inquietante y oscura, que bien podría encontrarse en cualquier obra actual, pertenece en realidad a esta novela escrita por Margaret Atwood a principios de los ochenta, en la que la afamada autora canadiense anticipó con llamativa premonición una amenaza latente en el mundo de hoy. En la República de Gilead, el cuerpo de Defred sólo sirve para procrear, tal como imponen las férreas normas establecidas por la dictadura puritana que domina el país. Si Defred se rebela o si, aceptando colaborar a regañadientes, no es capaz de concebir le espera la muerte en ejecución pública o el destierro a unas Colonias en las que sucumbirá a la polución de los residuos tóxicos. Así, el régimen controla con mano de hierro hasta los más ínfimos detalles de la vida de las mujeres: su alimentación, su indumentaria, incluso su actividad sexual. Pero nadie, ni siquiera un gobierno despótico parapetado tras el supuesto mandato de un dios todopoderoso, puede gobernar el pensamiento de una persona. Y mucho menos su deseo.Los peligros inherentes a mezclar religión y política; el empeño de todo poder absoluto en someter a las mujeres como paso...Llevaba bastante tiempo con hype por culpa de mi amiga Patri. Desde que lo mencionó tuve ganas de leerlo y justo vi que Salamandra lo iba a sacar puesto que antes se encontraba descatalogado en España, creo recordar. Y tuve la gran suerte de que mi hermano lo regaló por mi santo a inicios de mayo <3.
En cuanto lo tuve en mis manos lo devoré. No hay otra palabra para describir lo que me pasó con el libro. No me duró nada de tiempo y eso que me moderé porque tenía que estudiar. Al principio pensé que no lograría conectar con él porque el principio te contaba poco pero luego no puedes parar.
Como muchos ya sabéis la trama del libro se basa en la pérdida de los derechos de las mujeres que dejan de tener voz y voto y sus papeles son los de ser madres, ser esposas o ser criadas. Si no sirves para alguno de esos papeles te consideran una no mujer. No voy a contar más, lo único que voy a deciros es que la lectura es TAN real que a veces tenía que parar, asustada, porque es algo que se puede trasladar a la actualidad.
Realmente se puede trasladar a cualquier época en el que leas el libro porque Margaret no se centra en crear aparatos o describir en exceso ese mundo, se centra en transmitir la angustia, la rabia y el miedo de Defred. Muchas veces cuando paraba de leer me sorprendía diciendo "Es que eso pasa hoy en día o podría suceder". Una sociedad que se rige por el patriarcado, mujeres hablando mal de otras mujeres, mujeres descalificando a mujeres con términos machistas. Todo eso que gira entorno a vida de Defred es algo que podemos trasladar a la vida diaria.
Por supuesto, el libro tiene una carga religiosa que encontrará su justificación en la Biblia y será la base para todos los maltratos y vejaciones que sufren las mujeres en pos del poder de los hombres, algunos con más poder que otros, como siempre. Cosa que a mi parecer hace que te metas más de lleno porque hoy en día las grandes guerras y los grandes problemas surgen por el fanatismo a una religión, justo lo que refleja el libro.
Como distiopía es absolutamente perfecta y más creíble que Los juegos del hambre por lo que empatizar y leer con la piel de gallina no es complicado. En cuanto a los personajes, la gran protagonista es Defred, que no es su nombre real, es a quién pertenece. Les roban toda su identidad junto a sus derechos y su vida así que lo que sabemos de ella es lo que ella quiere que sepamos gracias a las memorias que crea. Por supuesto que interactúa otros personajes como son el comandante, su esposa, las Marthas, Nick, Moira o Deglen.
En cuanto a la pluma de Margaret poco puedo decir que no se haya dicho ya: Cautivadora, ágil y capaz de dejar indiferente a nadie. Sabe qué ritmo darle para que el libro te lo bebas y te deje con la incertidumbre. La novela no pierde el ritmo de principio a final -y qué final- así que para mí ha sido una lectura perfecta y ojalá la hubiera descubierto antes pero más vale tarde que nunca.
En serio, si aún no os habéis animado a leerla no sé a que esperáis. Lectura obligatoria y ojalá haga recapacitar a muchas personas.