Revista Deportes
Con la segunda quincena de Julio, llegan siempre las rebajas y los medios de comunicación lucimos los masters en rumorologia.
Y año tras año, aparece el padre de Neymar en un ejercicio calculado de ambigüedad, ofreciendo en secreto, insinuando sin concretar que su hijo puede marcharse.
Normalmente era el propio Neymar quien lo desmentía, una vez alcanzado el objetivo de que le subieran el sueldo , pero en esta ocasion el silencio del propio jugador , sus fotos en actitud de duda, ha sido una verdadera declaracion de intenciones, que sin una sola palabra lo dice todo de él.
Un silencio que duele, un silencio que parece esconder una traición.
Hay varias fuentes que dicen que Neymar quiere irse, y todo empezó de repente. Una mañana a Neymar le dijeron que tenia que estar triste, lo convenció su padre de que ya no era feliz en Barcelona, que aqui nunca seria el numero uno, y que necesitaba una nueva illusion.
Y parece que esa illusion puede recuperarla en Francia. Ganandole al Niza, al Marsella, al Monaco y al Bastia. Quiere dejar la liga Española para poder ganar cada semana y salir en portada de l’Equipe.
Y el padre va a cobrar sin que nadie denuncie la operacion) 46 millones por mover al niño de sitio.
Y Neymar será cabeza de ratón, de un ratón chiquitín pero muy rico. Y hasta puede que se plantee, tras triunfar en la liga francesa, volver a intentarlo en España, un poco mas al centro.
Y eso deberia ser un gran disgusto para la afición, pero no se detecta en exceso.
De hecho si por alguna causa(que seria economica, nadie lo dude) se frustrara, la sensación sería de cierta desconexión entre el jugador y la afición, a sabiendas de que si no sale este año lo volvería a intentar el próximo.Neymar ha dado goles, espectáculo pero nunca ha dado muestras de verdadero compromiso. Y si decide marcharse, la afición lo entenderá, recordará su expulsion en Málaga que nos costó media liga, su barroquismo a veces excesivo, sus sancsiones la semana antes del cumple de su hermana
y pasará página esperando que el dinero se gaste en buenos refuerzos, preferentemente que no tengan relación con Brasil ni con los que nos recomendaron a Douglas.
Tal vez el unico miedo sea ese, que esta directiva se gaste el dinero de Neymar en unos cuantos Overmars y un par de Petits.
Si se acierta y se hace bien, no sería tan grave el problema.