Tras ver en la entrada anterior el curriculum vitae cronológico, es hora de centrarnos en el curriculum temático o también llamado funcional. En este curriculum se establecen divisiones temáticas y no centradas en las fechas. Si hemos tenido algún hueco en nuestra carrera profesional o de estudiante o si la edad no nos beneficia para el puesto al que queremos optar este curriculum es una muy buena opción.
Si queremos acceder a un sector diferente al nuestro en el que no tenemos experiencia, elegir este tipo de curriculum es una muy buena opción. Sobretodo si tenemos estudios relevantes en este campo pero nunca hemos trabajado de ello. Con este curriculum se reforzará este apartado y se dejará más apartada la experiencia laboral.
Si somos personas flexibles, con varios puestos de trabajo en poco tiempo para ir ascendiendo de posiciones, este curriculum es perfecto ya que permite ver todas las empresas en las que hemos trabajado. En el mundo de las nuevas tecnologías estos curriculums se valoran mucho, pues la situación va cambiando y si tu has sabido cambiar con ella, el éxito en el proceso de selección estás casi asegurado.
Los inconvenientes de este curriculum dependerán de cada persona. Si hemos trabajo mucho tiempo en una empresa, mostrándonos responsables en nuestro cargo y subiendo escalones pero, por diversas circunstancias, la empresa ha cerrado, elegir este curriculum no sería beneficioso para nosotros. Quedaría bastante corto al centrarse en las empresas y no se vería nuestro ascenso periódico en la empresa en la que hemos trabajado. Por tanto, cuando queremos demostrar estabilidad y progresión es preferible no usar este curriculum.
Otro problema de este curriculum es que se puede hacer muy extenso si has pasado por varios trabajos. Recuerda que un curriculum se debe caracterizar por ser concreto no por tener una gran extensión.