Revista Cine
¡A todos aquellos que deseen conocer los terribles sucesos que acontecieron durante el mes de Julio del año del Señor de 1662 en la villa y corte de Madrid, les invito a que nos presten una parte de su valioso tiempo y unas cuantas generosas monedas porque la función está a punto de empezar...!Pedro Herrasti nos propone una entretenida y trepidante aventura en el Madrid de los Austrias plagada de asesinatos, mensajes cifrados y ambiente de imperio en decadencia. Pienso que es inevitable la comparación con las obras del Capitán Alatriste de Reverte, ya que comparten época y escenario y es fácil llevarse por alguaciles, corchetes, recuerdos de los Tercios y callejuelas madrileñas; incluso atisbo algún guiño del autor con la cita a un tal Malatesta, importador de papel genovés.Destaco, además de la calidad de la escritura, la continua confrontación entre los dos personajes protagonistas, tan distintos y tan compenetrados a la hora de la verdad; las ordenes religiosas dominantes: jesuitas y dominicos; y sin duda alguna las diferencias entre clases sociales tan marcadas entonces como ahora. Me quedo con una frase de uno de los diálogos entre los protagonistas: "Una cosa es la ley y otra es la justicia" Una verdad como un templo que suscribe y constata hasta el malvado y misterioso demonio Peregrino... ¡Calla lengua, que te vas! También es muy de agradecer las notas explicativas del autor al final del libro, donde de manera magistral expone los acontecimientos y personajes históricos en los que se basa y las añadiduras de su invención que completan y componen la obra. Para los habitantes o visitantes de Madrid no estaría mal recorrer los escenarios que todavía quedan en pie y que se describen en la obra. Y no olvidar dar las gracias a Salamanca Paso a Paso por su recomendación.