Y después de recuperarme del shock que esta afirmación produjo sobre mi persona... Yo, que siempre he apostado por el orden como herramienta indispensable para alcanzar el bienestar vital... Me puse a pensar detenidamente, que
tipo de desorden podría plantearme introducir en mi existencia para encontrar por fin el camino y dar solución definitiva a mis quebraderos de cabeza... Y decidí que, el máximo desorden al que podía aspirar sin acabar nerviosita perdida, sería el llamado DESORDEN BAJO CONTROL... Que paradójicamente ¡ES TENDENCIA!... Mostrar un espacio, donde así como no quiere la cosa, aparece una manta un tanto descolocada en el sofá, algunos libros desperdigados en el suelo, un cuadro torcido o una cama sin hacer... Un mensaje subliminal en toda regla... ¡Eih, los habitantes de este espacio de máxima tendencia son gente de lo más normal! ¡Apuesten por el diseño y hagan de la decoración una máxima en sus vidas!...Y ¿cual es vuestra particular apuesta en relación al orden?¡FELIZ SEMANA!