El despertar del póker en el país del sol naciente

Parece mentira que Japón, uno de los países rey de los juegos, no destaque por sus triunfos en el juego del póker. Sin Japón, el mundo de los videojuegos se hubiera desarrollado con la mitad de originalidad y salero del que nos acostumbraron, por no hablar de los fantásticos ejemplos de juegos de mesa que hay en la cultura japonesa. Sin ir más lejos, en muchos de estos juegos tradicionales japoneses, podemos encontrar muchas de las características básicas presentes en el póker:
Shogi - es el ajedrez japonés que, como el resto de la misma familia como el europeo o el chino, se trata de un juego de estrategia. Cada vez más, la lógica, la probabilidad y la táctica se consideran imprescindibles para poder alcanzar el éxito jugando al póker en detrimento del azar, al que durante mucho tiempo se le consideró el único factor determinante en el juego de naipes.
Oicho-Kabu - este es un juego de estrategia y azar, ambas cualidades presentes en el póker. De hecho, este juego japonés de cartas se asemeja a las reglas del blackjack, otro juego de los casinos como el póker, solo que en este hay que sumar 21 con las cartas y en el japonés solo hay que llegar a 9.

Karuta - es un juego de naipes japonés en el que se necesita rapidez de reflejos para identificar la carta adecuada. Para este juego se utilizan dos tipos de cartas, unas con poemas y otras con imágenes. La dinámica del juego es leer un poema y rápidamente ser el primero en coger la carta con la imagen que le corresponde. Otra original forma de ganar haciendo parejas.
Go - es un juego originario de China que destaca por poder poner en práctica ricas y complejas estrategias en donde las matemáticas, igual que en el póker, son importantes. Juegan dos jugadores que se reparten fichas blancas y negras y, el objetivo, es llenar una mayor porción del tablero que el oponente.
Pero a pesar de este catálogo de juegos de mesa basados en tácticas para los más estrategas, todavía es complicado jugar al póker en el país nipón. Si no fuera así, seguro que en las salas de póker habría más de un triunfo de jugadores japoneses, mostrando su potencial como nos tienen acostumbrados en otros juegos. Algo huele a cambio en Japón y parece que la moda modifica su rumbo en el juego de naipes. Los primeros en recoger esta variación en la corriente ha sido PokerStars con el fichaje de Kosei Ichinose.  La sala de póker online lo ha elegido para representar a su país en los torneos en vivo.
Ichinose, comenzó a jugar en el 2006 cuando estudiaba en Canadá y, desde que descubrió el juego de cartas se propuso vivir del póker. Fue recogiendo triunfos tanto en vivo, cuya suma en premios se valora en 305.576$, como en torneos online. Su mayor éxito lo consiguió llevándose al bolsillo en 2013 el torneo de Seúl dentro del campeonato Asian Pacific Poker Tour con el que consiguió 46.918$.

Kosei Ichinose no es el único paso que PokerStars ha dado para darse a conocer en el país asiático y ha buscado en la modelo japonesa Yuiko Matsuwaka, una imagen conocida en Japón para las tareas de publicidad y marketing.

Estas adquisiciones se suman a las colaboraciones que Naoya Kihara hizo en el pasado con el gigante del póker online. Este aficionado al Shogi es el único jugador de póker japonés que tiene un brazalete de las Series Mundiales de Póker que ganó en el 2012.
Al parecer los Juegos Olímpicos de Tokio en el 2020 pueden ser la causa de este intento de acercar, aún más, el juego del póker a los japoneses. La cantidad de visitantes occidentales al país del sol naciente en las Olimpiadas, podría llevar a un cambio en la regulación para que haya mayor libertad de juego y esto, facilitaría jugar al póker también a los autóctonos.
Solo será cuestión de tiempo que un país con la cultura del juego, el poder adquisitivo y la educación de Japón, se sumen al ruedo del póker y acaben demostrando que también, son unos ases  en el juego occidental del tapete verde.