El discurso del rey, crítica (The King’s Speech)
En una época de crisis en la cual se requería de líderes mostrando el camino, Jorge VI, Rey y Emperador del Imperio Británico se dirige por radio a sus conciudadanos con ocasión de la guerra declarada por Alemania al invadir Polonia en 1939. Comenzaba la segunda guerra mundial, y era imperativo que todo el imperio siguiera el liderazgo y la voz del rey. Especialmente cuando más allá del canal, Hitler se mostraba amenazante con un discurso y oratoria agresiva capaz de arengar las masas. El problema, sin embargo, era que el ¡Rey era tartamudo!
La película comienza en el reinado de Jorge V, primer monarca de la casa Windsor, mostrando la vida de sus dos hijos mayores: Eduardo Alberto Christian y Alberto Federico Arturo. A la muerte de Jorge V en 1936, le sucede su primogénito bajo el titulo de Eduardo VIII, quien posteriormente abdica en el mismo año a favor de su hermano pues como Rey insistía en contraer matrimonio con las dos veces divorciada y americana Wallis Simpson. Eduardo VIII no solamente despreciaba abiertamente las funciones reales sino insistía en causar una crisis constitucional. Alberto Federico asciende al poder bajo el nombre Jorge VI, a pesar de no desearlo ni de estar realmente preparado para el cargo, aunque mejor que su hermano. No se esperaba que Alberto llegara a ser Rey, era tal vez el menos favorito de su padre Jorge V y tenía cierta incapacidad de lenguaje, era tartamudo, generalmente incapaz de pronunciar discursos en públicos y cuando era menester hacerlo, su discapacidad realmente le impedía ser un buen orador.
Toda una historia llena de intrigas, de conspiración, espionaje y lucha de poder. Pero el discurso del rey no se trata de eso, aunque es el trasfondo sobre el cual se desarrolla la trama. Es más una historia de amistad entre Alberto Federico Arturo y Lionel Logue su terapista de lenguaje. Así comienza una relación en la cual el príncipe se pone en las manos de Lionel Logue de origen australiano en una ardua y larga lucha contra su tartamudez. La tartamudez le había valido ser objeto de burlas de otros dos reyes; su padre y su hermano.
El film gratamente retrata la historia reciente de la monarquía británica, a pesar de las críticas que se le hacen al achacarle que no es cronológicamente exacta y que presenta a un Eduardo VIII neutral cuando en realidad era pro nazi. El discurso del Rey, es una excelente película por sí sola y en especial para los amantes de la historia y de la monarquía británica. Está nominada a doce premios Oscar, incluyendo a mejor película del año, dirigida por Tom Hooper con guión de David Seidler. Tres actuaciones increíbles, la primera de Colin Firth en su rol de príncipe y luego rey, la de su esposa Isabel Bowes-Lyon interpretada por Helena Bronham Carter quien fuera la columna vertebral en todos los grandes logros de su esposo, y finalmente la de su terapista australiano Lionel Logue interpretado por Geoffrey Rush. La película no solo presenta a Jorge VI, sino también a su pequeña hija quien, en una de las escena, ya nombrado éste Rey y de vuelta a casa, en lugar de salir su hija a abrazarlo, le hace la más formal de las reverencia a su majestad el Rey del Reino Unido. Su hija, SAR Isabel II, Reina actual de Reino Unido, de Canadá y la mancomunidad británica y ejemplo en el cumplimiento de sus deberes constitucionales.