El Ecuador

6 meses = 184 días = 4416 horas... ..como Au Pair en EEUU

Fuente: http://todossomosuno.com.mx/portal/index.php/nunca-es-tarde/

Que alguien me explique cómo esta aventura ha llegado a la mitad. El tiempo se me ha ido volando, esfumándose de mis manos. Parece que fue el mes pasado cuando aún me encontraba en mi caso pensando que meter en la maleta para traerme a USA, cuando me encontraba en las interminables charlas del Training o los nervios de conocer a la familia. 
Han pasado tantas cosas desde ese 15 de Abril. Las niñas son completamente distintas de las que conocí el primer día, supongo que están en una edad donde se nota mucho el cambio, pero ahora están tan grandes, hablan mucho más, son más independientes... Puedo decir que desde que llegué ahora es cuando me siento más cómoda con mi trabajo, con la familia, en la casa... Acostumbrada a estar siempre sola he de decir que me costó más de lo que pensaba adaptarme a vivir de nuevo con una familia. A día de hoy sigo diciendo que he tenido mucha suerte con la familia que me ha tocado y lo comprensivos que son conmigo. Thank you. 
En este tiempo me ha dado tiempo de disfrutar de América, de descubrir Nueva York, ciudad de la cual estoy enamorada, de viajar a Boston, Atlantic City, Cape Cod... de ir a la playa, parques naturales, ir a ver a las ballenas, perderme en los Mall, ir de fiesta... Y en definitiva, de vivir América desde dentro, de ver su cultura y costumbres de primera mano. Pero no todo es de color de rosas, también me ha dado tiempo a perder las llaves de mi casa, a golpear el coche con un árbol o a recibir mi primera multa de la policía. 
Seis meses me han hecho darme cuenta de que en realidad sabía más inglés de lo que yo pensaba y también que debería poner todavía más esfuerzo por aprender. Ya que al fin y al cabo ese era el objetivo principal de venirme tan lejos. 
Sin duda alguna, nada de esto hubiera sido lo mismo sin las buenas amistades que he tenido la suerte de hacer aquí. Alba y Elena las conocí desde el primer momento que puse el pie en América y tuvimos la suerte de vivir relativamente cerca. A ellas se sumo Marta para las aventuras. Echo de menos a Natalia, quien no pudo más con esta aventura y decidió volverse a España. Con la que suelo pasar más tiempo es con Cristina, la verdad que no se que haría si no estuviera por aquí. Gracias. 
Muchos días siento nostalgia con todo lo que he dejado atrás. Echo de menos a mis padres. A mis hermanos. Echo de menos a mi abuela Paca. A Misu, mi gato. Echo de menos Madrid, sus calles y en especial a Tamara. Echo de menos Alemania y, aunque nunca pensé que lo diría, echo de menos Bochum. Ich vermisse dich Mario. A Carmen y a Kleine Cris. Y te echo de menos a ti. Han pasado tantas cosas desde que estoy aquí, que espero que este año me haya servido para saber lo que quiero.
Si bien, si miro atrás y recapitulo recuerdo más momentos buenos que malos. ¡A por los seis siguientes! 
¡SEGUIMOS HABLANDO!