Jorge Bucay escribe "Déjame que te cuente", un libro compuesto de cuentos cortos con moraleja. "El elefante encadenado" es una parábola tradicional y es uno de los relatos que integran el libro. Con ella, Jorge Bucay hace su primera incursión en la literatura infantil. Esta edición está ilustrada por Gusti con unas imágenes muy curiosas que poseen un halo de tristeza, representando la historia a la perfección. Observamos los dibujos que nos transportan a la infancia del narrador (el mismo Bucay) a un tiempo lejano, a recuerdos y a la sensación de descubrir la realidad de ese pequeño elefante y de muchos de nosotros.
A casi todos los niños les gustan los animales o sienten atracción por ellos. El narrador nos cuenta que le gustaba ir al circo y que su animal favorito era el elefante. También nos cuenta que su cariño por este mamífero le lleva a descubrir que después de la función donde demuestra su tamaño, fuerza y peso, queda atado a una pequeña estaca.
Su interés crece al ver cómo un animal tan grande no hace nada por escapar y comienza una pequeña investigación para dar con la respuesta. Después de respuestas poco convincentes pasa el tiempo hasta que un día un sabio le descubre la triste historia de ese elefante, ahora adulto.
"¿Qué sujetaba al elefante? ¿Por qué no escapaba?"La empatía y la sensibilidad del niño le llevará a cerrar los ojos e imaginarse a ese pequeño elefante muchos años atrás, las ilustraciones nos mostrarán esa situación, el momento más duro para el animal. Lo veremos atado junto a su madre, intentando liberarse y fracasando. Aceptando su derrota y viviendo como cree que está obligado a vivir."Si está amaestrado y por eso no escapa ¿Por qué lo encadenan?Nadie supo responder a esta segunda pregunta."
Estamos por tanto, acompañando a un niño a conocer una vida más real, a descubrir que detrás de ese mundo mágico del circo se esconde un fracaso, a hacerse adulto.
"Entendí entonces por qué el enorme y poderoso elefante que yo veía en el circo se quedaba encadenado: él estaba convencido de que nunca podría liberarse
de su estaca. El pobre animal tenía el fracaso grabado en
su memoria de elefante y jamás,
jamás había vuelto a poner a prueba su fuerza..."
Un relato que hace reflexionar acerca de la libertad, de creer en uno mismo, de probar nuestras capacidades y no admitir un no por respuesta. Nosotros nos convertimos en nuestros propios carceleros si aceptamos la derrota.
"Hasta que un día, el más triste de sus días de su corta vida, el elefantito aceptó que no podía liberarse y se rindió a su destino."