Si te interesa, lector/a, leer un pequeño manifiesto sobre la estética japonesa, sobre la estrecha relación entre la sombra y la belleza; si te apetece indagar un poco en los matices de esta relación a través de la arquitectura, la vestimenta, la cerámica, la decoración,..., la comida incluso; si te produce curiosidad contrastar esta perspectiva con la estética occidental, en donde la claridad, la luz y el color cuentan con una posición preeminente frente a lo negro y lo oscuro- con frecuencia con connotaciones negativas y terroríficas-; si te interesa, digo, quiero dejarte hoy esta recomendación. Esta joyita, El elogio de la sombra, del escritor japonés Junichiro Tanizaki (18886-1965), fue publicada por primera vez en 1933. Siruela la rescata en español en una muy bonita y cuidada edición.
"(…) creo que lo bello no es una sustancia en sí sino tan solo un dibujo de sombras, un juego de claroscuros producido por la yuxtaposición de diferentes sustancias. Así como una piedra fosforescente, colocada en la oscuridad, emite una irradiación y expuesta a plena luz pierde toda su fascinación de piedra preciosa, de igual manera la belleza pierde su existencia si se le suprimen los efectos de la sombra."
"¿Ha visto usted alguna vez, lector, 'el color de las tinieblas a la luz de una llama'? Están hechas de una materia diferente a la de las tinieblas de la noche en un camino y, si me atrevo a hacer una comparación, parecen estar formadas de corpúsculos como de una ceniza tenue, cuyas parcelas resplandecieran con todos los colores del arcoíris."
"En lo que a mí respecta, me gustaría resucitar, al menos en el ámbito de la literatura, ese universo de sombras que estamos disipando...Me gustaría ampliar el alero de ese edificio llamado 'literatura', oscurecer sus paredes, hundir en la sombra lo que resulta demasiado visible y despojar su interior de cualquier adorno superfluo."
¡Gracias por la visita!
¡Gracias por compartir!