Revista En Femenino
Piernas cansadas e hinchadas, sensación de pesadez, fatiga, agotamiento, y en verano mucho calor. Todas estas sensaciones, que la embarazada tiene ya asumidas como propias de su estado, desaparecen en cuanto se entra en el agua. Playa o piscina no importa, la sensación de pesadez se evapora y nos sentimos ligeras y ágiles, solo por eso vale la pena. El contacto con el agua es uno de los más agradables cuando se está embarazada, especialmente a partir del segundo trimestre, cuando la barriga empieza a destacar y la ligereza en los movimientos empieza a disminuir. En el agua el cuerpo Leer más sobre el artículo "El embarazo y el placer de hacer ejercicios en el agua"