El engaño del Cigarro

Fumar implica cambios y daños en el cuerpo que van desde lo físico hasta lo psicológico. El consumo de alcaloide es tan formal que encima de los daños que hace a todos, si todos, los sistemas del cuerpo humano, causa además daños a la parte psicológica de la persona y que hacen que esta desee fumar todo el tiempo creyendo que obtiene posesiones beneficiosos. Sí, suena singular el que digamos que este vicio puede manipular a una persona de esta modo, pero en efectividad no hay nulo más alejado de la verdad. Y es de lo que vamos a susurrar hoy.

Lamentablemente muchas personas, en distinto los fumadores, tienen la creencia de que, para nacer el cigarro no les hace el último daño, y que, por el contrario les permite sentirse mejor. Y este es el punto primordial. ¿De qué exactamente se sienten mejor? Porque lo que vamos a dejar en claro este día es que no es precisamente de algún mal, se negociación más adecuadamente de la exterminio de una de las consecuencias (exterminio temporal por cierto) del fumar. Y tiene que ver con la parvedad a la alcaloide.

DEJAR DE FUMAR PARA DEJAR DE ENGAÑAR A TU CUERPO

Ayuno se refiere a los posesiones que suceden en el cuerpo cuando este deja de cobrar algún tipo de sustancia, en este caso, alcaloide. La mayoría de sustancias controladas tienen este tipo de posesiones, los cuales por lo popular son severos, y se manifiestan cuando la persona deja de consumir esas sustancias, en el caso de dejar de fumar, así sea el periodo entre un cigarrillo y otro, se manifiesta con ansiedad (que dependiendo de la persona puede ser de leve a severa) y es precisamente lo que provoca la carestia de instalarse otro cigarrillo para darle al cuerpo la dosis de alcaloide que requiere.

Aquí es donde debemos nacer a ver las consecuencias de fumar, y además la razón por la que muchos dicen que no podrán dejar el vicio o que temen recaer, porque precisamente ese propósito de la parvedad es el más complicado de manejar y el que hace que se tenga tropiezos durante el periodo en que se trabaja para dejar de fumar.

Pero entonces, ¿qué se puede hacer? Bueno, para nacer entender que no es un camino sin salida, por el contrario, se puede obtener, y el método de Allen Carr se enfoca en eso precisamente, en crear un entorno que apoye al fumador para retener como manejar estos posesiones y como salir delante de ellos, porque si de poco estamos seguros es de que es posible dejar la alcaloide, es posible radicar libres de este terrible y destructivo vicio.
Una de las primeras partes de todo este sistema es precisamente el peña de apoyo, el peña de personas que ayudará en los momentos en que el fumador tenga estos accesos de ansiedad y desee consumir tabaco para superarlos. Igualmente ayudará para que otras excusas no lleven al fumador de revés al tabaco. Recordemos que muchas personas fuman bajo el enredo de que tuvieron un disgusto y necesitan calmarse, o que tuvieron una disputa y la decisión para pensar con claridad es el tabaco. No, ninguna es verdad. Es simplemente ansiedad por parvedad. Y el método de Allen Carr esta diseñado para que se pueda aventajar y radicar oportuno y desocupado.