-Sus compañeros en el Real Madrid y hasta el propio Ancelotti dicen que "es un poco raro porque no se permite comer ni un chocolate ni tomar una cerveza o una copa de vino"
-Para lograr la perfección hay que cuidar todos los detalles. Esto es lo que ha hecho Cristiano Ronaldo en el último año. Se ha obsesionado con la comida, el descanso y el entrenamiento hasta el punto de que le dijo a su madre, Dolores Aveiro, que tenía que supervisar todas sus comidas para que no tuvieran nada de grasa. La necesitaba a su lado como un apoyo más para encontrar esa vida casi monacal que se necesita para rendir al máximo en los partidos. Ha extremado su dieta. Su madre, que vivía entre su casa de Madeira, donde tiene al resto de la familia, y Madrid, decidió instalarse en la capital de España para estar pendiente de la dieta de Cristiano. Si había que salir a comer fuera del domicilio, la madre también revisaba el menú minuciosamente. Cristiano iba del entrenamiento a casa y allí se enclaustraba. Lo mismo hacía después de los partidos. Del estadio a su domicilio. No quería comer fuera. Prefería quedarse en casa y, si era posible, que fuera su madre quien le hiciera la comida y la cena. En ocasiones le tuvieron que decir que era conveniente que saliera y se aireara, que le venía bien desconectar. Dicen que, tras ganar el Balón de Oro, seguirá con la misma rutina. No se relajará.
La dieta, en este último año, ha sido una obsesión para el nuevo Balón de Oro. Sus platos no tienen grasas. Tiene prohibido que se acompañen con salsas y, lógicamente, están eliminadas las frituras. Un deportista de su nivel necesita un alto porcentaje de calorías. Lógicamente ha seguido las recomendaciones de los nutricionistas que hablan de comer pasta y arroz, como platos principales, para llenar el 'depósito'. Pero fuera del control de los especialistas, los jugadores cometen sus excesos y caen en tentaciones. Podríamos recordar cómo Messi, a finales del año pasado, publicó una fotografía en su red social en la que se le veía cocinando carnes a la parrilla. Se puso en entredicho la alimentación del argentino y la incidencia que podía tener en su físico, ya que sufrió varias lesiones musculares en el segundo semestre del año.Cristiano se ha privado de chocolates, dulces y todos aquellas debilidades que sí tienen otros jugadores. Algunos de sus compañeros de equipo le llaman “raro” por todo el cuidado que pone. Tampoco prueba el alcohol. A los futbolistas no les está prohibido tomar una cerveza o una copa de vino de vez en cuando. En su menú abundan los pescados y las verduras a la plancha y al horno. Igual que los zumos naturales.El entrenamiento es sagrado. “Compite como entrena. Llega el primero a la Ciudad Deportiva, se machaca en el gimnasio y es un perfeccionista. Se cuida mucho”, dice Zidane. Tiene a Ancelotti impresionado por cómo trabaja cada músculo de su cuerpo antes y después de ejercitarse en el campo. Es un trabajo de prevención. También llama la atención por el tiempo que dedica a la recuperación con los fisioterapaeutas. Su obsesión por estar en forma le hace seguir trabajando en el gimnasio de su casa por las tardes.Hay días que duerme más de 12 horas. Le gusta echarse la siesta y mantiene los horarios de su etapa en Inglaterra cuando estaba en el Manchester United. Se acuesta pronto. El descanso es tan importante como la alimentación, dicen los especialistas y el portugués ha tenido que renunciar a muchas invitaciones de eventos deportivos y no deportivos, o cambiarlos de horario, para seguir con sus hábitos.El nuevo ganador del Balón de Oro es un ejemplo de superación. Sólo así, con esta fortaleza mental y los sacrificios que hace para rendir en cada partido a un alto nivel, se explica su profesionalidad. Cristiano Ronaldo conserva los valores que en su infancia le inculcó su madre. Los del trabajo y el esfuerzo. Nació en uno de los barrios más pobres de Funchal (Quinta do Falcao). Su padre murió a los 51 años por problemas con el alcohol y su hermano Hugo cayó en las drogas. Cristiano y su madre consiguieron que entrara en una clínica de rehabilitación. Así se sigue forjando la personalidad de un profesional del fútbol que ha vivido experiencias tan amargas y al que el éxito y la fama no le han confundido.
FUENTE http://www.teinteresa.es/Futbol Base y mas