El equipo que menos asistencias ha dado en un partido NBA

En la historia de la NBA hay records y datos estadísticos que no dejan de sorprendernos aunque sepamos que en la liga norteamericana prácticamente todo es posible. En este caso el record del equipo que ha dado menos asistencias en la historia de la NBA es algo más que impactante.

Sobre el papel y siempre en un plano teórico, es más sencillo conseguir asistencias en la NBA que en el baloncesto FIBA por el simple hecho de como se contabilizan. El lapso temporal entre el pase y la canasta se dilata en la NBA mientras que en el basket FIBA se comprime pero bueno esto como decíamos en más bien teórico.

Antes de recordar el partido en el que un equipo ha dado menos asistencias en la historia es importante contextualizar el dato. Por ejemplo en la temporada 2017- 2018 se repartieron asistencias en una franja que va desde los Blazers con 19.5 pases de canasta por partido hasta los 29.3 de los Golden State Warriors. La gran mayoría de equipos se movieron entre las 21 y las 24 asistencias por noche.

El equipo que tiene el honor de haber dado menos pases de canasta en un sólo partido se quedó muy lejos de estas cifras de la actualidad.

El 28 de marzo de 1976 en un partido entre los New York Knicks y los Boston Celtics, los de la Gran Manzana tan sólo dieron 3 asistencias en todo el partido.

Tan sólo Earl Monroe, John Gianelli y Butch Beard dieron una asistencia cada uno en el partido. Aquellos Knicks fueron el peor equipo pasador de aquella temporada con 20 asistencias por noche mientras que en lo más alto de la clasificación de pases por noche quedaron los Rockets con 27 por partido.

Los Celtics se llevaron aquel extraño partido por 100 a 94 repartiendo 21 asistencias en el partido. Los 14257 espectadores del Boston Garden probablemente no fueron conscientes que acababan de vivir una noche histórica.

Nunca ningún equipo en la era posterior al reloj de posesión ha dado tan pocos pases de canasta en un partido. Aún así los Knicks anotaron muchos puntos de forma individual y desde la línea de tiros libres.

Curiosamente en aquellos Knicks había un jugador que se convertiría años más tarde en uno de los mejores entrenadores de la historia de la NBA... hablamos de Phil Jackson.