El espíritu navideño en Dinamarca

¡Hola de nuevo! Soy Michelle, del blog sobre Dinamarca Velas y vikingos, y hoy os traigo un tema que en este país nórdico tiene mucha miga: la Navidad (Jul en danés).

La iluminación navideña se coloca ya desde principios de noviembre, esta calidez lumínica es muy importante porque oscurece a las cuatro de la tarde. Además procuran no quitar las luces hasta principios de febrero, así que ya veis que están más que amortizadas. Aquí os dejo varias peculiaridades que hacen que sean unas fiestas muy esperadas y disfrutadas:

Kalenderlys y adventskrans

En Dinamarca se consumen muchas velas, es un elemento fundamental para crear esa atmósfera de bienestar o hygge que tanto disfrutan sus habitantes. Por eso se estilan mucho las kalenderlys (velas de calendario), con los números del 1 al 24. Cada uno de estos 24 días de diciembre, después de desayunar, se enciende la vela hasta consumir el número correspondiente.

Otra tradición relacionada con las velas es la adventskrans (corona de adviento). O las confeccionan con elementos de la naturaleza o las compran, pero son realmente espectaculares. A estas coronas se incorporan cuatro velas, y cada domingo previo al nacimiento de Jesús se enciende una para esperar su llegada.

Santa Lucía

El 13 de diciembre se celebra la procesión de Santa Lucía en colegios, hospitales y muchos centros públicos daneses. Es una costumbre sueca que comenzó en Dinamarca tras la Segunda Guerra Mundial. En este desfile solemne, se apagan las luces y varios niños vestidos con túnicas blancas y una vela encendida entonan la canción de Santa Lucía, para recordar que hay luz en la oscuridad del invierno.

Los nisser

En Escandinavia hay unos personajes que cobran mucha relevancia en estas fiestas: los nisser. Son unos duendecillos o gnomos de pequeño tamaño pero considerable fuerza que, según la leyenda, protegían a las granjas y ayudaban a que hubiese una buena cosecha. Eso sí, tenían un temperamento muy fuerte y si les molestabas te podían hacer la vida imposible. A los nisser les encanta el arroz con leche y en Navidad ayudan a Papa Noel (Julemand) a repartir los regalos, así que los niños tienen muy presente que se tienen que portar muy bien.

Pakkeleg

Otra tradición muy divertida es el pakkeleg (se traduciría como ‘jugar a los paquetes’). Es un tipo de amigo invisible, pero con la gran diferencia de que no tienes un regalo garantizado. Cada participante lleva un presente envuelto y lo coloca en la mesa (como se celebran varias citas de pakkeleg en las Navidades los regalos suelen ser sencillos, rondando los 5 euros). La dinámica del juego consiste en que cada persona tirará un dado y cuando le toque un seis puede coger un regalo, hasta que ya no quede ninguno libre. En ese momento se activa el cronómetro y cuando a alguien le toque un seis puede coger el regalo que quiera de otra persona. Es muy divertido y un poco cruel, porque hay participantes que pueden lograr cinco o seis regalos y otros ninguno. Es una estupenda ocasión para ver el mimo con el que los daneses envuelven los regalos, a veces da pena abrirlos de lo bonito que es el paquete.

Nochebuena y Nochevieja

Otra tradición de Nochebuena es que, tras la cena (recordad que en Dinamarca se cena pronto, alrededor de las 18 horas) la familia enciende unas velas en el árbol de Navidad y baila alrededor de él.

En Nochevieja, otra peculiaridad que tienen es que, para empezar bien el año, no se puede tocar el suelo, así que a las doce se encaraman a una silla o al sofá y saltan. Y después es muy habitual encender fuegos artificiales para dar la bienvenida al nuevo año que comienza.

¿Os han gustado estas tradiciones navideñas de Dinamarca? Qué enriquecedor es ver cómo se celebra la Navidad en otros países, ¿verdad?