Septiembre también fue un mes de intenciones y se quedó a medio camino de conseguirlo. Por una falta absoluta de tiempo, la mayoría de las lecturas que veis aquí han sido catadas en la primera y última semana del mes, y es que os confieso que este mes ha sido de lo peor que llevo de 2015... y que no se repita más, por favor.
Por suerte, las lecturas han sido una delicia, empezando por El factor sobrenatural, de Edgar Cantero, con su habilidosa mezcla de suspense y paranormal. Su principio desconcierta pero luego es un no parar de leer. Y a destacar su edición, que cabalga entre diarios personales, recortes de prensa y grabaciones de cámaras caseras. Igual de contenta me ha dejado Una llama entre cenizas, de Sabaa Tahir, que aunque huele a ciertas sagas actuales, se desbanca gracias a su crueldad y reminiscencias del Imperio Romano. Con mil ganas de leer la continuación, vaya.
También os recomiendo Los vivientes, de Matt de la Peña, un debut en nuestro país que, si bien nos puede recordar a una serie española más que buena, nos hará disfrutar con el misterio y la pura supervivencia en alta mar. Y cómo no, este mes he releído Las Pruebas, de James Dashner, con motivo de su adaptación cinematográfica, y quizá ha sido un grave error, pues más diferente no ha podido ser la película del libro... pero nada como refrescar una grandísima historia. Para rematar el cóctel distópico, Los 100. Día 21, de Kass Morgan, también muy adictivo, y aún no sabría decir si me ha parecido más interesante los acontecimientos en la Tierra o en la nave. Un tanto desbancado y marginado queda Te daré las estrellas y mucho más, de Sarah Dessen, mi último intento con esta autora. En la reseña os contaré más, pero os adelanto que no me ha gustado.
Pasamos a la novela gráfica de El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, de Ransom Riggs y dibujo de Cassandra Jean. No tiene más misterio pues es la adaptación de la primera novela, aunque es una gozada poner cara a los personajes y ver el mundo creado por el autor. No está en España, así que os tocaría leer en inglés, pero vale mucho la pena. En cuanto a mangas, he puesto fin a los dos tomos que componen Ataque a los titanes: No regrets, que cuentan la historia de Levi, y aunque el primero me motivó mucho, el segundo no me ha dicho nada. Más bien me ha dejado con la sensación de desperdiciar el dinero... menos mal que el tomo 5 de Hakaiju, de Shingo Honda, estaba ahí para enmendarlo. Qué historia tan increíble y sangrienta.
Y me despido con mis destacados del mes:
El factor sobrenatural, de Edgar Cantero, mezcla hábilmente suspense, paranormal y humor. Perfecto si buscáis terror y todo tipo de giros con un estilo muy cinematográfico.Si preferís la fantasía y la acción pero con un toque a sabor antiguo, Una llama entre cenizas, de Sabaa Tahir, os cautivará con su crueldad y ritmo trepidante.Si os gustó El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, de Ransom Riggs, no podéis hacerle ascos a su novela gráfica. Fielmente adaptada y con un estilo mágico.
¿Habéis leído alguno? ¿Qué os ha parecido?