Revista Cultura y Ocio
10 de abril de 1710.
En Gran Bretaña se aprueba la
primera ley que protegía los derechos de autor, el primer “copyright”.
En efecto, la primera vez que se tomó la decisión de salvaguardar
la propiedad intelectual de los autores, tuvo lugar en el siglo XVIII, en Inglaterra,
concretamente en 1710, y recibió el nombre de “Estatuto de Ana”, por tratarse
de una disposición firmada por la reina Ana I de Inglaterra, aprobada previamente
por el parlamento británico.
El objetivo era reconocer los
derechos de los autores, que pudieran editar su libro donde les viniera en
gana. Una manera de proteger las obras, los derechos sobre las mismas por parte
de sus creadores y fomentar la libre producción
y la difusión literaria.
“Teniendo en cuenta que, impresores, libreros y otras personas, en los últimos tiempos se han arrogado la libertad de impresión, de reimpresión y publicación, o han hecho que se impriman, reimpriman, y publiquen libros y otros escritos, sin el consentimiento de los autores o propietarios de tales libros y escritos, en perjuicio de estos y, a menudo, llevándolos a la ruina propia y de sus familias: Por lo tanto, para prevenir estas prácticas en el futuro, y para el fomento de los hombres a componer y escribir libros útiles; con la venia de su Majestad, promúlguese este estatuto.”
El Estatuto disponía de un
plazo de protección para las obras de 14 años, prorrogables otros 14 años si el
autor seguía con vida. También establecía un plazo de protección de 21 años
para todas la obras aparecidas con anterioridad a la fecha de aprobación de la ley
y contando el plazo a partir de la fecha de aprobación.