El estreñimiento del lactante

La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.

Albert Einstein

- Mónica Soldevila -

Para saber si nuestro bebé tiene estreñimiento debemos diferenciar entre “Estreñimiento real” y “Pseudo estreñimiento del lactante”.

El “Pseudo estreñimiento del lactante”

Un bebé recién nacido hace caca con cada toma o incluso más de una vez por toma, debido al reflejo gastrocólico: En cuanto come y el estómago empieza a llenarse manda órdenes al intestino para que empiece a hacer sitio.

Su barriga tiene poca capacidad y al entrar comida nueva tiene que decidir entre hacer sitio a la nueva (con más alimento) o quedarse con la vieja (con menos alimento).

Decide hacer sitio a la nueva leche sin haber acabado la digestión de la toma anterior (por eso salen grumos blancos; es leche sin digerir).

Al principio el bebé no controla el esfínter del ano, no puede cerrarlo ni relajarlo por lo que cuando se le mueven las tripas (cada vez que come) se le sale la caca.

Llega un momento (entre las 2 y las 8 semanas habitualmente) en que el ano empieza a tener fuerza suficiente para contener la caca. El niño puede relajar o apretar el esfínter, pero no sabe cuando hacer una cosa o la otra.

Después de cada comida sigue teniendo el reflejo gastrocólico. Entonces empieza a apretar la barriga (lo que muchos padres interpretan de forma equivocada como que tiene gases) y puede estar un rato molesto y haciendo ruidos de queja hasta que se pasa el reflejo.

Esto le ocurrirá después de cada toma en la que no consiga hacer caca. Si durante la toma consigue hacer caca se quedará a gusto y se relajará enseguida.

Hace caca si relaja el ano mientras tiene el movimiento de tripa: Si lo relaja cuando la tripa no se mueve o si cuando ésta se mueve no lo relaja, puede estar días sin hacer.

La clave para saber que no es estreñimiento real es:

Cuando por fin consigue hacer caca, a veces varios días después, ésta es BLANDA.

¿Por qué no hizo antes?

Porque no dio la casualidad de relajar el ano mientras la tripa se movía.

El tratamiento:

Si lleva más de dos días sin hacer deposiciones y esto te preocupa, puedes darle un masaje o moverle las piernas. Los medicamentos dejaremos que sea el pediatra quién se los recete.  Un bebé puede estar 20 días sin hacer caca sin problema, especialmente si toma leche materna, ya que ésta se digiere rápidamente y apenas deja residuos. Lo ideal es no hacer nada y no agobiarse; ya verás como hace mucha caca cuando aprenda a relajar el culete.

El pseudo-estreñimiento es normal y lo padecen, en algún momento, la mayoría de los bebés hasta que aprenden a hacer caca. Si el problema se agrava y el niño parece sufrir mucho o pasan más de 20 días sin que haga caca, los pediatras pueden recomendar Verolax o Paidolax (enemas de glicerina de 4 ml) si consideran que hay una patología. (Esto no ocurre casi nunca).

Si leéis el prospecto veréis que pone “no recomendable para menores de 2 años”. Porque en lactantes pequeños, si se introduce la cánula del enema hasta el fondo, puede hacerles daño. Por tanto en los menores de dos años puede usarse pero introduciendo sólo 1 centímetro o centímetro y medio la cánula y comprimiendo el enema para que entre su contenido.

La clave para que sea efectivo está en el momento que lo estimulemos:

El momento más adecuado para usarlo es cuando notamos que el niño está encogiendo las piernas, con la barriga dura y haciendo gruñidos. En ese momento se están produciendo movimientos en el intestino con la intención de expulsar las heces, pero no consigue relajar el ano.

La introducción de la cánula del enema estimula su relajación, y al introducir la glicerina favorecemos la expulsión de las heces. Si lo hacemos de este modo conseguimos educar al niño para que entienda que cuando note los apretones de la barriga debe relajar el ano. Hay niños que esto lo aprenden en dos días y otros que tardan dos meses.

No deben usarse los supositorios de glicerina (miden más de 1,5 cm) ya que hacen más daño al entrar y suelen echarlos enteros con lo que también hacen daño al salir.

No debe usarse tampoco el bastoncillo con aceite, la cerilla, la ramita de perejil ni el termómetro, porque ninguno de éstos está esterilizado y si le hacemos una herida puede infectarse con facilidad.

El estreñimiento real del lactante

Está realmente estreñido si las heces son duras. Suele estreñir más la leche artificial que el pecho. Por eso algunos bebés se estriñen al cambiarles a la leche artificial.

Otros se estriñen por falta de líquido, generalmente por preparar mal la leche (muy concentrada). Y los hay que simplemente son estreñidos.

Cuando la caca es dura quiere decir que necesitan en la alimentación algo que les ayude. Si ya toma fruta hay que evitar la manzana y el plátano maduro porque estriñen. Le ayudará, por ejemplo, la naranja o la mandarina, la ciruela, el kiwi, la piña…

Pero con la naranja, que suele ser lo más usado hay que evitar el error de dar el zumo. El zumo tiene mucha vitamina C pero no contiene fibra. Es la pulpa que se queda en el exprimidor lo que aligera. Por lo que conviene echar los gajos enteros en la licuadora y batirlos para preparar el zumo.

Si además toma verduras evitad la zanahoria y el arroz y no os paséis con la patata porque estriñen. Deben darse verduras con hebras (judías verdes, puerro, apio…).

Cuando a pesar de tomar todo esto, el bebé no hace caca si no se le estimula o si todavía no toma más que leche, hay que añadir algo más: La Eupeptina es lo que el pediatra le daba a mi hija cuando se estreñía mientras aún era lactante y funcionaba. Ella tuvo problemas para hacer caca cuando empezó a comer otros alimentos además de la leche, aunque seguía dándole pecho. Lo que hacía era extraer la leche con un sacaleches y mezclarla con la Eupeptina en un biberón.

No uséis Eupeptina en el Pseudo-estreñimiento, porque no soluciona el problema, sino que lo empeora: Hace que se mueva más la tripa (más retortijones) pero si el niño no relaja el ano no sale nada. Su caca ya es líquida, por lo tanto,darle algo para ablandarla más no tiene ningún sentido. Lo que hay que conseguir es que aprenda a apretar el abdomen a la vez que relaja el esfínter del ano.

La Eupeptina es un laxante que no se absorbe y no tiene dosis fija. Hay niños que con una cucharadita hacen 7 deposiciones y los hay que con 7 cucharaditas no hacen ninguna.

Se empieza con dos cucharaditas al día mezcladas en agua, manzanilla o en el biberón con la leche y si no tiene deposiciones se aumenta una cucharadita más cada día hasta que se regule.

Si llega un momento que hace más veces al día se puede bajar la dosis de cucharada en cucharada mientras siga haciendo bien o volviendo a subirla si se vuelve a estreñir. Y se puede mantener el tiempo que sea necesario.

Los laxantes no producen adicción como se dice por ahí. Lo que sucede es que cuando alguien se estriñe y con un laxante se regula es porque en realidad necesita más fibra en la dieta y cuando se deja de utilizar el laxante, el estreñimiento sigue estando ahí.

Lecturas recomendadas:

LA DENTICIÓN

¿QUÉ SON LAS VACUNAS?

VACUNAS – TABLA Y TIPOS

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