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Impasibles al paso del tiempo enormes piedras salpican el paisaje de ciertas regiones de Europa, desde las húmedas y frescas costas atlánticas hasta las soleadas y calurosas islas mediterráneas. Parece que siempre han estado ahí, pero no.
Esos enormes bloques pétreos, a primera vista en mitad de la nada, fueron erguidos, colocados y ordenados de una u otra manera, pero siempre con la intención de ser vistos y, quizás en un alarde de arrogancia, eternos.
El Fenómeno megalítico en Europa
¿Qué es el megalitismo? El termino no puede ser más preciso y literal: piedra grande, procedente de vocablos griegos; mega (grande) y lithos (piedra), pero en Prehistoria esta palabra se refiere a la primera arquitectura en piedra con carácter monumental desarrollada en Europa la cual se extendía por toda la fachada occidental del continente así como el entorno mediterráneo.
Estos monumentos fueron erguidos en épocas remotas, abarcando las etapas denominadas Neolítico, Calcolítico e incluso el comienzo de la edad de Bronce en ciertas regiones europeas. El apogeo del fenómeno megalítico lo encontraremos alrededor del 2000 a.C. con una gran variedad y multitud de monumentos repartidos por Europa.
Pero, ¿Para qué servían?
El papel principal de estas edificaciones solía ser funerario y/o religioso, bien como santuarios donde se podrían llegar a realizar ritos y ofrendas a la deidad correspondiente, o bien como necrópolis.
Se intuye cierta cohesión y organización social para poder erguir tales monumentos; hace falta tiempo e inversión de trabajo, y para esto es necesario tener las necesidades básicas bien cubiertas para que estos grupos humanos dediquen su esfuerzo a este tipo de actividades.
Ya visto para que servían estos lugares pasamos a ver los diferentes tipos de estructuras. A modo general los podemos clasificar en dos categorías:
- Dolmen: quizás el más común y característico del fenómeno megalítico. Con un periodo de utilización desde el Neolítico y Calcolítico; Se destinan a enterramientos colectivos, en estas tumbas se enterraban a varios individuos, lo cual no quiere decir que todos fueran enterrados a la vez, si no que estas serian reutilizadas durante generaciones.
Los dólmenes están formados por una cámara principal o funeraria, delimita el espacio grandes lajas de piedra clavadas verticalmente en la tierra para posteriormente colocar una gran losa. Estas piedras que forman la cámara funeraria pueden aparecer decoradas bien con motivos grabados o pintados. Los motivos representados son variados (geométricos, antropomorfos, zoomorfos, etc.) y se relacionan con el carácter de la estructura (religioso, funerario o simbólico).
Esta estructura de piedra se recubría de tierra y formaba un montículo denominado túmulo. A modo de refuerzo para que esta tierra no se moviera se ordenaban piedras de forma concéntrica alrededor del túmulo, las cuales a veces son tan grandes como las de la cámara principal.
Pueden aparecer de forma aislados o bien como enterramientos colectivos, los cuales llegan a formar verdaderos cementerios.
Este tipo de estructura la encontramos dispuesta de diferentes modos:
Tipo básico: una única cámara cubierta por un túmulo
Galería cubierta: cámara alargada a modo de pasillo, sin diferenciación de espacios.
Sepulcro de corredor: se accede a través de un pasillo el cual va a parar a la cámara funeraria.
Estos tres tipos expuestos son los más comunes, si bien existen multitud de variantes regionales.
- Menhir: la forma más básica de megalito, se trata de una gran piedra alargada, a veces en estado natural y otras tantas trabajada colocada verticalmente sobre el suelo con su parte inferior enterrada para evitar su caída.
Muchos de estos menhires están decorados, gran parte de las decoraciones de estas piedras tienen un carácter antropomorfo, se les denomina estatuas-menhir, en ellas se graban rasgos antropomorfos y decorativos.
El tamaño medio de estos es aproximadamente de 10 metros si contamos la piedra que se encuentra dentro del suelo.
Tienen una cronología, al igual que el dolmen, bastante amplia, desde el 5000 al 2000 a.C. a modo general, evidentemente siempre podemos encontrar excepciones.
A diferencia de los dólmenes, estos se suelen relacionar con funciones religiosas, rituales o ceremoniales. La mayoría están emplazados en zonas de gran visibilidad, a modo de elemento de culto o como lugar para realizar observaciones astronómicas. En ocasiones, muchos de estos menhires se encuentran ligados a dólmenes lo que hace recalcar el carácter religioso del mismo.
Dentro de este tipo de megalito podemos diferenciarlo en los siguientes tipos:
Menhires aislados
Alineamientos de menhires los cuales tienen una disposición rectilínea formando una o varias filas paralelas que llegan a alcanzar varios cientos de metros
Crómlech o círculos de piedras, se trata de una alineación de menhires, que a diferencia de los alineamientos, estos se disponen a modo de formas cerradas, cuadrangular, ovalada, circular, rectangular, etc.
Henge y túmulos circulares, es un tipo de estructura megalítica característica de las Islas Británicas, estos son muy parecidos a los crómlech, con una función claramente ceremonial, se disponen generalmente a modo circular u oval delimitados por postes de madera o menhires y rodeados de una zanja o muro, en el caso de los túmulos se encuentran cubiertos de tierra.
A modo de conclusión podemos afirmar que el megalitismo se trata de la primera arquitectura europea, la cual hace patente el cambio de mentalidad de estas gentes y que quizás, comienza a asentar los cimientos de la sociedad actual, un primer acercamiento a una sociedad compleja, jerarquizada y con capacidad para adaptarse y evolucionar según las circunstancias.
Autor: Sergio Campos Sánchez para revistadehistoria.es
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Bibliografía:
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SHEE, ,E. (1981) The Megalithic Art of Western Europe. Clarendon Press, Oxford
BRIARD, J. (1995) Les Megalithes de l’Europe Atlantique: Architecture et Art Funerarie –(5000-2000 avant J-C). Errance, Paris
BURENHULT, G. (1993) Los constructores de megalitos de Europa Occidental (4800 – 2800 a.C.) Piedras, tumbas y templos en el litoral atlántico. Círculo de lectores, Barcelona
Fernández Vega, A., Hernando Grande, A., Maíllo Fernández, J. M., Muñoz Ibañez, F. J., Quesada López, J. M., & Ripoll López, S. (2021). Prehistoria II. Las Sociedades Metalúrgicas (3a Edición). Editorial Universitaria Ramon Areces.
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