El fútbol nuestro de cada día

Tan sólo llevamos cinco jornadas de liga, y ya hemos tenido tiempo suficiente para vivir las primeras emociones en éste campeonato, que se me antoja será cuando menos, divertido éste año.

Y no lo digo fundamentalmente por los resultados, porque al final, y como cada temporada, salvo alguna agradable sorpresa, casi siempre son los mismos los que acaban arriba en la tabla, y como es lógico, los presupuestos suelen ser los que marcan las diferencias.

En definitiva, arranca un campeonato marcado por un denominador común, la austeridad y el control de gastos a todos los niveles, con unos presupuestos aquilatados al céntimo, situación acorde con los momentos que vive nuestro país. Se abrió el telón con el primer numerito de la amenaza de huelga por el reparto del dinero de las televisiones y corrieron ríos de tinta durante semanas con el anuncio de las altas y las bajas, principalmente en los equipos llamados a priori a pelear por el título.

Se abrieron debates del tipo: Kaká hoy no, y mañana Kaká sí, culebrones interminables, como el anunciadísimo fichaje de Modric, aletargantes especulaciones sobre si Tito Vilanova estaba o no preparado para manejar los mandos de la nave, esperpénticas tertulias relacionadas con la tristeza de un incomprendido Cristiano Ronaldo, hasta que por fín, empieza a rodar el balón, y empezamos a hablar de … Fútbol.

Como digo, llevamos tan sólo cinco jornadas y ya hemos tenido tiempo de sorprendernos con algunos acontecimientos. El más llamativo es ver al Real Madrid a ocho puntos del Barcelona, y fuera de los puestos que dan derecho a jugar en Europa, situación que por otra parte, debe cambiar lo antes posible para la buena marcha del negocio. Si no hay equilibrio en la lucha por el título, desciende el grado de emoción, y por lógica disminuyen los ingresos.

Buen comienzo del Rayo Vallecano, que se coloca líder provisional, y que pronto da síntomas de empezar a perder gas. Sorprendente arranque del At. de Madrid, que realizó una pretemporada durísima en cuanto a preparación física se refiere, y al que Simeone ha sabido transformar en un equipo comprometido con el esfuerzo, y que además practica un buen fútbol.

Buen comienzo también de un Málaga que ha sabido conjugar su puesta a punto para superar la previa de la Champions, y rendir a un buen nivel en el arranque liguero, para colocarse entre los cinco primeros, empatado a puntos con Sevilla y un no menos sorprendente Mallorca, que al igual que los demás, cuenta sus partidos en casa por victorias. Ninguno de estos cinco equipos saben a día de hoy lo que es una derrota.

Por abajo, decepcionante comienzo de Granada, Español y Osasuna, que todavía no conocen el triunfo, y de los que se esperaba mucho más, si nos atenemos al trabajo realizado por sus respectivos técnicos en anteriores temporadas.

En fín, lo dicho, creo que éste año nos vamos a divertir, con un campeonato de locura colectiva, en el que ya han comenzado a arreciar las críticas hacia el colectivo arbitral, con alusiones a la influencia del Generalísimo en el amaño de la competición. Suerte a todos.