Recientemente se anunció que Samsung había culminado las investigaciones concernientes a qué estaba causando que los Galaxy Note 7 ardieran en llamas. Samsung divulgará pronto sus conclusiones respecto a qué ocurrió. Pero hoy, de acuerdo con un reporte de The Wall Street Journal, que ha obtenido el informe que Samsung revelará este 23 de enero en Seúl, el Galaxy Note 7 tuvo dos problemas mayores diferentes en sus baterías.
Este reporte, que fue elaborado por 3 firmas de análisis independientes, manifiesta que los problemas con los primeros lotes de baterías, elaborados por Samsung SDI, se debieron a que estas eran demasiado grandes físicamente para el chasis del Note 7, causando que un pequeño número de ellas se sobrecalentaran y ardieran.
Lo realmente absurdo de esta historia está en lo que se halló con las investigaciones del segundo lote de baterías, las cuales en esta ocasión fueron manufacturadas por Amperex, otro proveedor de baterías de Samsung. Se encontró en estas baterías un defecto de fabricación no especificado, causado (presumiblemente presionados por Samsung) por la aceleración forzosa de una línea de producción que no estaba lista para producir a tal escala. En otras palabras: diferente causa, mismo problema.
Con todo, se reporta que Samsung perdió 5 billones de dólares con todo el proceso de devolución y retiro del mercado de su buque insignia. Aún con la debacle del Note 7, Samsung no ha dejado de generar ciertas ganancias. Pero algo igualmente importante y que es un hecho: la reputación de Samsung y su línea Galaxy Note de cara a la opinión pública está por los suelos, especialmente en el mundillo, donde aun es blanco de las burlas.
[vía Android Central]