El girasol y su poder de curacion

El girasol y su poder de curación.

El girasol tiene en su haber el poder de curación de varios males que muy pocas personas pueden conocer, ya que entre otras cosas puede ayudar a prevenir la fiebre o los problemas estomacales. Esta planta que tanto llama la atención por seguir la dirección del sol, puede ser incluida en algunos productos medicinales caseros o remedios que nos ayuden a combatir algún mal o enfermedad.

Dentro de la medicina casera, el girasol se puede usar para erradicar la fiebre, maceando varias hojas secas de esta planta, unirlo a 20 gramos de alcohol y filtrarlo para ser consumido cada tres horas. Aparte de para la fiebre, la planta de girasol como remedio popular también ayuda a que se pueda prevenir la formación de coágulos de sangre en nuestro organismo, contrarrestar los problemas de afonía o dolores de garganta molestos que podamos sufrir, detener el tinnitus en nuestros oídos o mejorar el cuidado de nuestras manos a través de una suculenta crema que se puede llegar a elaborar con el aceite de girasol.

También, para la persona que quiere dejar de fumar, puede apoyarse en las semillas de girasol en el proceso de dejar de fumar, ya que masticar estas semillas cuando se tienen ganas de fumar disminuirá esas ganas terribles que se pueden sentir.

Fuera de la medicina casera, el aceite de girasol ayuda a las quemaduras que se produzcan en la piel, sobre todo si son creadas por radiaciones solares. Su consumo ayudará a disminuir el colesterol malo que se pueda quedar en nuestro organismo, llevando así con su paso un sistema de limpieza eficaz. Las semillas de girasol pueden dar calorías que nuestro organismo necesite o que eche en falta, además de actuar como un calmante para detener un poco los nervios que podamos sentir en un momento determinado.

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