Revista Economía

El giro hacia la racionalidad económica, una cortina de humo

Publicado el 08 diciembre 2011 por Andi

PESE AL CORTE DE SUBSIDIOS SEGUIRÁ LA FIESTA DEL GASTO Y LA EMISIÓN

Pese al empeño de la oposición y de la mayor parte de los medios independientes en querer demostrar que la eliminación de subsidios es un ajuste fiscal, los anuncios hechos hasta ahora por Julio de Vido y Amado Boudou indican lo contrario. El último anuncio dejó en claro que los hogares que ganen menos de 5.200 pesos no sufrirán la eliminación del subsidio. Por otra parte, lo anunciado hasta ahora se hace con ánimo revanchista contra sectores de alto poder adquisitivo que se oponen al gobierno que viven en zonas donde en las elecciones perdió el oficialismo. El resultado fiscal de este corte no llega a los 10.000 millones de pesos, casi lo mismo que se perdió por la recaudación de retenciones del complejo agrícola-ganadero debido a la baja de los precios.

EL GIRO HACIA LA RACIONALIDAD ECONÓMICA, UNA CORTINA DE HUMO

La coherencia ante todo

Muchas veces durante la campaña electoral la presidente dijo que los que quieren un ajuste no la busquen a ella. No se la puede acusar hoy de incoherente: aquí no hay ningún giro a la derecha ni hacia el sector empresarial. Más bien, hay más de lo mismo, más gasto público y más emisión monetaria. Y seguramente también la intención de algún tope a precios y salarios. Aparte, da la impresión de que el enfrentamiento presidencial con Hugo Moyano no es contra el movimiento obrero sino más bien contra un dirigente que no le jura lealtad incondicional.

En realidad, da la impresión de que el anuncio de la eliminación de subsidios fue un artilugio para impactar en la opinión pública cuando arreciaba la corrida cambiaria y bancaria. Ésta, por otra parte, ahora fue postergada, porque se impuso un virtual feriado cambiario permanente que no se sabe cuánto durará. La intención, obviamente, es no dejar actuar al mercado de la oferta y la demanda de divisas.

 En definitiva, es un ingenuo el que piense que la presidente, ante la crisis de la deuda de Europa y la desaceleración de la economía brasileña, va a dosificar el gasto público. Ella vive en un mundo irreal, donde la economía del 2011 creció al 8% gracias a las cifras del INDEC, pero en realidad fue del 5,5%. La publicitada eliminación de subsidios fue un engaña pichanga para frenar la corrida con una medida aparentemente liberal pero nada más. Así las cosas, sólo una implosión de las variables económicas podría obligar a CFK a modificar la política económica. Hasta que esto ocurra, todo seguirá igual.


Volver a la Portada de Logo Paperblog