Un grupo de residentes en una zona costera situada a 17 kilometros de la ciudad de Cienfuegos, cerca de la playa Rancho Luna y del Delfinario, se queja de que el Gobierno ha cerrado una playita que ellos limpiaron.
Según los entrevistados en este reportaje, realizado por , se trata de un pedazo de costa que varios vecinos prepararon, en sucesivos trabajos voluntarios, con el propósito de convertirlo en playa y poder disfrutar de ella.
Sin embargo, una vez que consiguieron su propósito, las autoridades vinieron, cercaron la playa y ahora cobran por entrar al lugar 30 pesos en MN a los niños y 75 a los adultos.
"Es muy rico venir a coger la playita, ¿por qué no lo hicieron cuándo eso era roca viva?", se pregunta una de las vecinas, mientras otra recuerda que ya han elevado quejas a varios niveles del Gobierno.
La llamada "Playita de los Castro" ―en alusión a una familia que reside en el lugar desde antes de 1959― ahora está incluida en el Delfinario, que pertenece a la cadena Palmares.
Indignados, los vecinos no dudan en citar la Constitución para defender sus derechos de baño en una playa que ellos prepararon y que recuerdan que es pública.
"Nosotros no somos muñecos pintados en la pared", subraya una de las vecinas; y añade que irán donde sea necesario para defender sus derechos: "Como si tenemos que ir a hablar con el presidente de aquí", remata.