NUEVAS REVELACIONES
El PP de Madrid decidió hace tiempo enviar a sus cachorros de misión opositora a Cuba amparándose en su anonimato
El Ministerio español de Exteriores critica la iniciativa de Esperanza Aguirre de mandar a sus cachorros a alimentar la oposición cubana. Exige a los conservadores madrileños la "máxima cautela" en sus críticas al Gobierno de la isla.
Carromero llevaba 4.000 euros a Cuba para respaldar a la disidencia interna en el momento del accidente. La declaración de Aduana se hace a partir de 5.000.- Un diplomático de Exteriores califica de "innegable actividad clandestina" el viaje de Carromero.
En La Habana, Ángel
Carromero, en la declaración
grabada por la policía cubana
y en la que se responsabilizó
del accidente en el que
fallecieron los
disidentes Oswaldo Payá y
Harold Cepero.
ANA PARDO DE VERA (Tomado de "Público")
Hace días que no se escucha ni se lee declaración alguna de miembros del Partido Popular de Madrid sobre la situación de Ángel Carromero, y hace ya poco más de un mes de su accidente en Cuba, cuando en el coche en el que él conducía murieron dos personalidades decisivas de la disidencia de la isla, Oswaldo Payá y Harold Cepero. La fecha del juicio al vicesecretario general de Nuevas Generaciones (NNGG) del PP de Madrid por homicidio imprudente y para el que la Fiscalía pide siete años, podría ser el 31 de agosto, aunque no ha podido ser confirmada oficialmente. Lo más tarde, apuntan fuentes diplomáticas, el mes de septiembre. Pero nadie se atreve a asegurar nada.
El Gobierno español ha puesto a disposición de la defensa de Carromero "todo lo que se puede poner", lo cual en sus circunstancias, admite el mismo entorno de forma no oficial, "no es mucho": el cónsul en contacto permanente con Carromero; prestigiosos abogados expertos en presos internacionales en Cuba (dos como mínimo) del Barrio de Miramar de La Habana y el internamiento en el centro del Ministerio del Interior cubano '100 y Aldabó'. Allí, Carromero comparte un apartamento (salón, televisión y cocina) con otro retenido. No tiene relación con otros reclusos ni siquiera para comer, pues funcionarios cubanos le llevan lo necesario.
Además, como confirmó el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, hace unos días su departamento trabaja discreta y constantemente para traerse a Carromero a España, ya sea en condición de expulsado de Cuba (no tendría que cumplir pena alguna) o para ingresar en alguna prisión de nuestro país a cumplir la pena si se lograse un convenio bilateral. Esto sería posible si la de Carromero fuese realmente la detención de un turista por cuya supuesta imprudencia murieron dos cubanos anónimos. Pero el potencial político del asunto ensombrece su resolución y la carga de incertidumbre.
Un entorno en contra


