Inmigrantes en Melilla tras superar una de las vallas fronterizas que separan la ciudad autónoma de Marruecos en un nuevo asalto masivo
Mientras que los inmigrantes encaramados a las vallas de Ceuta y Melilla son para el Gobierno… “una moda” y el delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, ironiza con el uso de un extintor por parte de un agente, alegando que “Tal vez tendría que haber soplado”, Amnistía Internacional condena la “ofensiva desproporcionada” contra los inmigrantes en Melilla. El organismo pide una investigación independiente sobre la actuación de la Guardia Civil por el uso de aerosoles y de un extintor. Amnistía Internacional reclama que se abra una investigación independiente porque considera que la Guardia Civil actuó de manera desproporcionada frente la avalancha de inmigrantes, cuando usó aerosoles para hacerlos bajar de la valla y los expulsó de manera ilegal, según la organización defensora de derechos humanos. AI lamenta que el Gobierno no preste atención a las llamadas y recomendaciones para que se respeten los derechos humanos en Ceuta y Melilla. Esteban Beltrán, director de la sección española de AI, declara, en la Cadena SER, que el uso de extintores o aerosoles no tiene ni ninguna explicación. “Solamente se puede usar el extintor para apagar el fuego de una persona, no como un arma ofensiva, y el uso de gas pimienta refleja un paso más en medios desproporcionados. En el mismo sentido, los sindicatos policiales han admitido que no hay protocolo, pero que hay que respetar la ley”.
El espacio entre las dos alambradas, donde a menudo se refugian los inmigrantes, es motivo de discrepancia entre el Gobierno, las ONG que trabajan en la frontera e incluso el Defensor del Pueblo. El Ministerio del Interior devuelve a Marruecos a todos los subsaharianos que alcanzan este espacio porque, asegura, no han pisado aún territorio español, alegando que esto sólo se produce cuando superan la segunda valla. Pero, tanto las organizaciones humanitarias como la defensora, Soledad Becerril, consideran que este suelo sí pertenece a España y, por tanto, a los sin papeles se les debía abrir un expediente y aplicarse con ellos la Ley de Extranjería. El pasado 25 de abril el Consejo de Ministros aprobó el procedimiento de emergencia para acometer obras en los perímetros fronterizos de Ceuta y Melilla, con un importe de 2,1 millones de euros, que se destinarán a instalar mallas “antitrepa” en ambas vallas. “España –ha declarado el ministro del Interior– no renuncia ni vamos a renunciar a que a nuestro país se entre de forma legal y de forma ordenada”. Pero los antidisturbios españoles han aplicado extintores contra los inmigrantes que se atreven a saltar las vallas, en una lucha desproporcionada contra ellos, como si fueran mosquitos envenenados.