A través de un comunicado conjunto, las ONG y la administración del Frente Polisario han recordado que la crisis se ha traducido en un recorte de las partidas de cooperación internacional, lo que está afectando de forma directa a la situación de los campamentos saharauis.
El tema ya fue tratado en la Conferencia Internacional de Coordinación Europea de Solidaridad con el Sáhara Occidental que se celebró en febrero en Sevilla, pero los firmantes de la nota han incidido, más de cuatro meses después, en que la ayuda sigue siendo esencial.
En este sentido, han hecho hincapié en que los saharauis que viven en los campamentos de refugiados cercanos a Tindouf son “un colectivo totalmente dependiente de la comunidad internacional”, toda vez que siguen sin darse las condiciones “para el retorno a su tierra”.
Para la RASD, la Media Luna Roja e Infancia Sin Fronteras, “el ejemplo más alarmante” es el de la seguridad alimentaria, dependiente al cien por cien de la ayuda internacional porque la producción propia de alimentos sólo representa el 0,7% en los campamentos.
“El reciente descenso en la ayuda internacional ha provocado que en la actualidad el 30% de los niños y niñas menores de cinco años padezcan desnutrición, y el 67% de las mujeres lactantes y el 50% de las embarazadas sufran de anemia”, han advertido las tres organizaciones firmantes.
En este contexto, tanto las autoridades saharauis como Infancia Sin Fronteras y la Media Luna Roja se adhirieron a un texto aprobado el 8 de mayo durante un encuentro entre universidades y organizaciones en el que se pide al Gobierno español que “mantenga su compromiso con la asistencia humanitaria y de cooperación” y “asuma el protagonismo que le corresponde por vínculos históricos para lograr un apoyo equivalente de la Unión Europea y otros organismos internacionales”.
Fuente: EuropaPress
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