Durante dos años, la “máquina de Dios”, como muchos la han bautizado, echa el cierre para un proceso de modernización
FRANCIA.- El Gran Colisionador de Hadrones , el acelerador de partículas elementales situado bajo la frontera entre Francia y Suiza y que ha permitido el descubrimiento del bosón de Higgs, ha comenzado este jueves 14 de febrero un paro de casi dos años. Durante este largo apagón, la «máquina de Dios», como se la conoce popularmente, será sometida a un proceso de modernización para incrementar su potencia de 8 a 14 teraelectronvoltios. La Organización Europea de Investigación Nuclear (CERN) señala que la desconexión no quiere decir que sus actividades sean menos emocionantes. «Aunque no habrá colisiones durante un período de casi dos años, todo el CERN será un hervidero de actividad, con la gran labor en curso de modernizar la infraestructura y preparar el LHC para funcionar a una energía más alta», señalan en un comunicado. «La vida aquí será cualquier cosa menos aburrida». «Durante el gran apagón se realizarán toda una serie de trabajos de renovación», dice Simon Baird, director adjunto del departamento de Ingeniería de la organización. El equipo reparará unas 500 interconexiones simultáneamente y los trabajos de mantenimiento cubrirán toda la circunferencia de 27 kilómetros que ocupa el LHC. Además, se mejorará la protección de los equipos a la radiación mediante su reubicación o la adición de blindaje.
Los trabajos no se limitan al LHC. Importantes obras de renovación están previstas, por ejemplo, para los sincrotrones de protones o para el sistema de ventilación de los túneles, que serán desmantelados y sustituidos. El LHC se toma un respiro tras haber cumplido su objetivo, detectar señales claras de una partícula elemental con características muy similares a las que describen el bosón de Higgs, logro que consiguió el pasado verano. Se trataba del último elemento que faltaba en el modelo estándar de la física de partículas. Cuando el acelerador reanude su actividad en 2015 con nuevas mejoras técnicas y aumento de energía, los científicos esperan poder observar otro tipo de fenómenos que ayuden a comprender los orígenes del Universo.