
El caso es que hoy leíamos en Europapress una entrevista al director de márketing se Xbox en España, Alejandro Camino, y comentaba que el éxito de Kinect ha sido rotundo en nuestras fronteras, con una base establecida en esta campaña navideña de 200.000 camaritas para la consola del tito Bill.
Estos datos solo nos producen cierta incomprensión, ya que como con tamaño catálogo, refrito de diferentes títulos anteriores con un nombre un poco distinto (¿Kinect Sports o Wii Sport?) o simplemente despropósitos de juegos ya lanzados intentando entrar en la cresta de primeras compras de este dispositivo (como Sonic Free Riders). De todas formas no solo basura a precio de medio billete verde ha salido, solo pudiéndose sacar los dos titulillos de bailes.
Lo que intentamos decir con este artículo que ya toca a su fin, es que cómo pretendemos defender una industria a la cual acusamos de precios de elevados precios y poca calidad en muchos de sus casos si el propio consumidor es que da pie a las grandes empresas como Microsoft a desfasar de tamaña forma a ellos mismos.
De todas formas sabemos que esto no es del todo culpa del usuario comprador, sino de las grandes campañas publicitarias que incitan a los niños a gritar a tempranas horas de la mañana a sus papas para que le compren la novedad de turno.
Nos encontramos en una encrucijada que, esperemos de una forma u otra, acabe solucionándose.