Hemos llegado al final de esta trilogía. Sinceramente, ha sido un gustazo poder leerla seguida sin esperar meses y meses por la llegada del siguiente libro.
Esta vez me ha costado callarme sobre los dos libros anteriores así que si no los has leído yo te recomiendo que te leas la reseña por encima.
~ Crónicas del Mago Negro * Trudi Canavan ~
~ El Gremio de los Magos * La Aprendiz * El Gran Lord ~
~ Precuela: The Magician’s Apprentice ~
~ G * Adulta - fantástica ~ E * DeBolsillo ~
Ha pasado un año desde que Sonea se enfrentó a Regin y desde que descubrió una parte del secreto del Gran Lord Akkarin. Desde entonces ha aprendido mucho pero hubiera preferido no saber lo que esconde Akkarin, así como la advertencia de éste sobre la venganza que preparan los antiguos enemigos de Kyralia. Por otro lado, Akkarin está mostrándole a Sonea cada vez más conocimientos para acercarla a la magia negra, pero ¿no se tratará de un ardid para que ella le sirva en sus siniestros propósitos?
Los amigos de Sonea tampoco lo tendrán fácil. Cery ha tenido suerte en los últimos años. Disfruta de una buena posición entre los ladrones. Cuando un extraño le propone participar en una misión secreta, la acepta sin dudarlo.Por otro lado, Rothen sigue igual de preocupado por Sonea, incluso más cuando descubre un cambio en ésta que no le hace mucha gracia. ¿Y Dannyl? Sigue en Elyne con Tayend donde cooperan juntos en una misión encargada por Akkarin. Un grupo de gente de Elyne quiere aprender magia por si solos y parece ser que uno de ellos lo ha conseguido.
Y los extraños asesinatos en la ciudad que investiga Lorlen siguen sucediéndose…
<<Lorlen abrió los ojos y retiró la mano del brazo del hombre. Observó el corte superficial que tenía a un lado del cuello, convencido de que aquella era la herida que lo había matado. (…)
“Así que es verdad –pensó-. El asesino utiliza la magia negra. Pero ¿es esto obra de Akkarin, o hay otro mago negro suelto en la ciudad.” >>
El Gran Lord da comienzo casi un año después del final del segundo libro y, aunque todo sigue más o menos su curso, algo ha cambiado en alguno de ellos, como en Sonea que con muchos más conocimientos de magia empieza a ver diferente la postura de Akkarin, sobre todo cuando éste comienza a mostrarle conocimientos que no debería hacer... Pero eso no es todo, los asesinatos siguen ocurriendo y no parece que vayan acabar. Las pistas que Lorlen y la guardia tienen van cerrando el círculo de sospechosos, ¿darán con el enemigo? Como podéis notar, todas las tramas que se lanzaron durante los dos primeros libros y que seguirán durante la primera parte de este tercero (incluso algunos comenzarán) culminarán con un final que no dejará indiferente e a nadie.
Si me sorprendía de lo que llegó a sufrir Sonea en La Aprendiz, no tiene nada que ver con lo que tendrá que enfrentarse en este último libro. Ha llegado el momento en que Sonea tenga que decidir que es lo mejor para ella y, sobre todo, que es lo mejor para su gente, para su familia. A partir de ahí tendrá que hacer frente a lo que venga sin pensar en sus consecuencias. Y creedme, las tendrá. Pero la historia no se centrará sólo en Sonea, por fin podremos conocer a fondo ese misterioso Gran Lord, así como tendremos más detalles de los demás personajes: Dannyl, Lorlen, Rothen, Cery… todos participarán en el fin de esta trilogía dándonos momentos de tensión y acción, todo para poder sobrevivir.
Aunque parezca que cuento mucho en el argumento de más arriba, no es así porque hay mucho más. Trudi Canavan ha sabido mantener bien la intriga soltando las sorpresas más importantes cuando menos te lo esperas.
Ya sólo queda hablar del final, de ese final que te hace quedarte con la boca abierta y al mismo tiempo indignarte ante lo que sucede y acabar repitiéndote “¿Por qué?” No es que sea un mal final, ni mucho menos, simplemente sucede algo con el que te quedas completamente impactada/o.