Y un excelente oftalmólogo, de larga tradición en la web con su proyecto divulgativo Ocularis, que desmonta una a una todas las afirmaciones de los vendedores para sacar el dinero a los incautos. Tras un primer artículo contundente: Reticare, mentiras y negocio
Los ojos trabajan con luz, necesitan la luz para ejercer su función. Es un órgano que está expuesto a la radiación solar en todos los animales, incluidos nosotros. La evolución ha ido adaptando y modificando el órgano para que no se deteriore, como es fácil de suponer. No se ha demostrado que una exposición normal a la luz solar sea perjudicial, y no se ha demostrado que ninguna protección o barrera prevenga de enfermedades oculares. No se ha demostrado que se produzca un deterioro de la retina debido a la luz visible más energética (luz azul), y no se ha demostrado que filtrando esta luz azul prevengamos de daños en la retina. Por otra parte, la luz solar es más intensa y energética que la luz artificial que se originan en pantallas LED. Si con la dosis más alta los filtros no son útiles, con la dosis más baja, la plausibilidad es incluso menor.La empresa contraataca y pretende censurar el artículo anterior. Reticare (II) Intentan censurar este blog
La respuesta en las redes sociales fue inmediata, manifestando el apoyo al autor, y en contra de estas maniobras cuando se denuncian con datos los fraudes científicos. Ampliar en: El SupositorioRecientemente, la compañía que se lucra con Reticare se ha puesto en contacto conmigo. De manera, digamos, poco elegante, ha intentado obligarme a retirar el artículo que les dediqué, así como su difusión y comentarios relacionados a través de las redes sociales (principalmente Twitter y Facebook). Es una maniobra comprensible, ya que artículos como éste van directamente en contra de sus intereses comerciales. Lo que quizás sorprenda a alguno que haya comprado el filtro en cuestión, es que en su carta no intentaron avalar sus afirmaciones en base a estudios científicos; creo que se dieron cuenta que no había nada que hacer por esa vía. Pasaron de puntillas sobre ese particular (vamos, que para ellos lo relevante no era si lo del Reticare es verdad o mentira) y directamente intentaban meter miedo a través de sus abogados. A mi modo de ver, es una forma de censura, algo así como: “no me conviene que se divulguen tus razonamientos, así que te asusto para que no te expreses”.