Mi puntuación: 5/10
Revista Cine
Dejando de lado como han idealizado en esta película una figura circense que torturaba animales y esclavizaba personas, nos encontramos ante un musical al uso, compuesto por nueve canciones diferentes con melodías que nos resultarán familiares, destacando dos, que siendo sinceros, consiguen erizarnos el vello. La puesta en escena es funcional, con decorados y coreografías modestas, y el guión, con alguna subtrama de relleno, goza de un gran ritmo en su inicio y final. En definitiva, un largometraje cuya duración está bien calibrada y que tiene un reparto, que sin deslumbrar, desprende la energía y la motivación necesarias, para hacerla accesible y fácil de ver a todo tipo de público.