Revista Cultura y Ocio

El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble

Por Agramar @Eldescansodeles
El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble
El Guerrero número Trece, o Trece Guerreros como le pusieron el titulo en América Latina (Título original The 13th Warrior), es una de esas películas que, basadas en una novela que fuertemente criticada, con un casting peculiar cuanto menos, una producción de pesadilla y una resultado final nada halagüeño, rematado por una recaudación nefasta (Se la considera uno de los grandes descalabros cinematográficos en cuanto a recaudación, ya que recaudó en todo en mundo unos 61,7 millones de dólares US, cuando llego a costar más de 160 millones de dólares US) es de esas películas, que, años más tarde la gente eleva al podio que no pusieron ni la crítica ni la taquilla, ni siquiera las ventas de DVDs, porque de alguna forma la gente conecta con una épica que le agrada de sobremanera y convierte en icono popular elementos o escenas de la película que hacen rechinar los dientes a críticos, entendidos (O "entendidillos" , según se mire), historiadores, etc por como fueron escritas o creadas (Y eso solo mirando la película, que se vamos a la novela en la que se basa...).
Es paradójico, no?.
El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble
 El Guerrero número Trece es una película que salió en 1999, aunque en realidad iba a salir dos años antes. Esta dirigida por el director norteamericano John McTiernan, (Que fue ademas unos de los productores) y basada en unos de los best-seller del escritor Michael Crichton (Parque Jurásico, El Mundo, Congo, Esfera, etc. Fue además otro de los productores), titulado en español  Devoradores de cadáveres. Esta novela a su vez se basa, de forma bastante peculiar en los escritos reales de Ahmad ibn Fadlan (Nombre completo: Ahmad ibn Fadlān ibn al-Abbās ibn Rāšid ibn Hammād), un poeta y diplomático árabe de los tiempos del Califato Abasida (Siglo X), que fue parte de una embajada enviada al reino vasallo de los Búlgaros de Volga, embajada truncada porque fueron retenidos por unos Rus, un pueblo emparentado con los antiguos escandinavos y con los que tenían muchas cosas en común. Estos Rus se los llevaron con ellos en sus viajes, y el escrito que hace Ahmad, que ha llegado a nuestros días, es un informe detallado de porque no pudo cumplir su misión y que vio en sus viajes.
Dura unos 105 minutos y en ella participan, entre otros, Antonio Banderas,Vladimir Kulich,Tony Curran, Jann Dennis Storhøi, Diane Venora, Clive Russell, Omar Sharif, Maria Bonnevie, Eric Avari  y hasta cuenta con cameo de Sven Ole Thorsen (Debe ser una de las pocas películas que sale el sin su compi Arnold Schwarzenegger) en un personaje que crípticamente es nombrado en el reparto como "Would be King" (Tal vez el que en la novela llaman Thorkel?).

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Doce de los Trece Guerreros...

La película narra cuando un joven y muy inteligente poeta de Bagdad llamado Ahmad ibn Fadlan (Antonio Banderas) es enviado en misión diplomática lejos de su tierra porque tuvo la ocurrencia de fijarse en la mujer de un hombre poderoso y muy celoso. Este se quejo al Califa, que decidió quitarse el marrón de encima enviado lejos a Ahmad, a una embajada en tierras peligrosas. En el viaje le acompaña un amigo de su padre, Melchisidek (Omar Sharif) que está versado en lenguas. Cuando su caravana es atacada por los Tártaros, huyen hasta queda bloqueados por un río, pero los Tártaros huyen al ver remontar el río un barco vikingo.
Eso les lleva a descubrir un poblado de "hombres de Norte" donde son admitidos, aunque son cautelosos ("Tal vez nos dejen ir o tal vez nos maten"). Allí se enteran de que se esta celebrando el funeral del "rey" del poblado y que se ha elegido uno nuevo, Buliwyf (Vladimir Kulich) Tras ver sus, para ellos, bárbaras costumbres, Ahmad y su caravana, asisten a la llegada de un mensajero desde las tierras del rey Hrothgar, que pide ayuda a Buliwyf, contra "un mal que no debe nombrarse" (Los Wendol) algo que descubre Ahmad asusta a los propios vikingos. Es Wulfgar (Bjorn Ove Pedersen), el hijo pequeño de Hrothgar, por lo que se da a entender que problema es de la mayor gravedad posible.

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Y el que faltaba

Se hace llamar a una oraculo, una Völva, que tras lanzar los huesos, profetiza que 13 guerreros, tantos como lunas tiene su año, han de ir al reino de Hrothgar y luchar para librarlo de ese mal.  Buliwyf encabeza a los doce primeros, pero el numero 13, dice la profecía, no ha de ser el norte, por lo que "reclutan" a la fuerza a Ahmad, al que le llaman "Ibn" ("Hijo de" en árabe), porque pasan de aprenderse todo su nombre, por mucho que el lo intenta. Esto da paso a un largo y tortuoso viaje, que no es mas que la antesala de los horrores y la aventura que está por llegar. Ahmad deberá apañárselas con su ingenio y su habilidad para no solo sobrevivir si no ademas ganarse el respeto de sus nuevos compañeros.

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 Michael Crichton

La película se basa en una novela que a su vez es una interpretación bastante libre de unos escritos del siglo X. La idea de la novela, que salió originalmente en 1976 y no llegó a España hasta 1983 (Ed. Plaza & Janés), era se un relato de ficción histórica con ciertos toques pseudo-fantásticos y algo de intriga y erotismo, intentado presentar un posible origen histórico del mito de Beowulf. Pero el autor se toma una cantidad de licencias históricas realmente excesiva. Y el lo sabe y al final de la obra intenta medio apañarlo con supuestas hipótesis de unos ficticios especialistas, a modo recurso literario y echando sombras a los descubrimientos que había hasta el momento, al tiempo que contradice cosas del inicio del libro (A ver, Ahmad es un frío funcionario dando un mas frío informe o se da licencias y embellece las cosas que cuenta? En que quedamos?), pero la verdad es que falla bastante. Mas bien mucho.
 Ya no solo da por hecho de que Beowulf esta basado un hecho del siglo X (Los especialistas no se ponen de acuerdo a la hora de fecharlo y hay quien habla del siglo VIII o IX al XII. O incluso antes, ya que se cree que el "Rey Hrothgar" hace mención a un rey danés del siglo VI, por ciertas similitudes entre sus historias), sino que por si fuera poco traslada a unos criptidos (Los Almas, o supuestos Neardentales que sobrevivieron a la extinción de su especie hasta casi nuestros días, que son de Asia, sobre todo central) a Europa del Norte, haciéndolos una rama evolutiva diferente del Homo Sapiens Sapiens. Además, ignora hechos históricos y científicamente demostrados como que los Neardentales no sobrevivieron, sobre todo en Europa, a la Glaciación de Würm (Que es la última glaciación), les da manifestaciones artísticas que no son de ellos (Estatuas similares a la Venus de Willendorf (Que es del Paleolítico Superior, cuando los Neardentales se extinguieron en el Paleolítico Medio), dar por hecho de que eran caníbales (Se sabe que lo eran, pero por temas funerarios, no por "paladar") o tomar partes de los ritos funerarios de los antiguos escandinavos de forma errónea o siendo anacrónicos para la fecha de los hechos (Cosa que por cierto, dicen en la película de boca del persona de Omar Sharif), por no hablar por tratar igual a los Rus que al resto de escandinavos, sobre todo en sus costumbres higiénicas (Igual no tan limpios como los árabes, pero mucho más que los cristianos europeos).
Básicamente, Michael Crichton no dejó que la Historia (Y la Antropología, la Arqueología, la Paleontología, la Criptozoologia y otras disciplinas científicas) le estropeasen su historia, algo de lo que se le ha acusado ya varias veces en otras obras, y me temo que con bastante razón.
El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble
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La película lo que hace es re-adaptar la novela, dándole un toque mas espectacular y de acción y re-escribiendo pasajes enteros. Esto no es lo malo de la obra, como por ejemplo cambiar a los Enanos que ayudan a Buliwyf y sus guerreros por una extraña anciana rodeada de hijos con evidentes retrasos mentales y a la que acceden por intercesión de la reina y esposa de Hrothgar, Weilew (Diane Venora), que tiene un papel muy activo en la película y deja de ser un adorno que es en la novela. O poner un personaje femenino ligado afectivamente a Ahmad, Olga (Maria Bonnevie), en las partes en las que en realidad son diálogo que tiene el protagonista con un anciano de la corte del rey. O que Ahmad es mucho mas listo y activo como guerrero de lo que es en la novela, ademas de bastante diestro con la espada, cuando en realidad debería ser un petimetre y un cobarde (Antonio Banderas tenía que justificar su chache). Igual es más bien chocante, por ejemplo, ver a los miembros del grupo, a los que cambian a muchos de ellos el nombre y el papel que tienen en la novela, mas bien como un grupo de mercenarios y aventureros de un juego de rol fantástico, equipados de las formas mas extrañas, con armamento y armaduras anacrónicos (Por ejemplo, uno de los Trece llamado Halga, lleva un casco de Mirmidón, un tipo de gladiador romano) para la época o demasiado adelantados para el momento (El propio Buliwyf lleva una elaborada armadura de placas, mas propia del siglo XV, o incluso XVI, que del siglo X) o la extraña jerga que hablan en la película y que tratan de hacer pasar por antiguo escandinavo y en realidad es una extraña mezcla de alemán con islandés.
Aunque chocante, a veces esperpéntico incluso y criticado por no pocos, esto no es lo que a mi chirrido del film. Incluso hay partes buenas, como un Holmgang o duelo, bastante bien reproducido.

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Quien es quien en los Trece


No, lo que realmente hecha perder la película es un montón de fallos, cortes, trasquilones  e inexplicables vías muertas, que vienen por el tortuoso rodaje, montaje, re-rodaje y re-montaje. Cuando la película estuvo terminada en 1997, hicieron un par de pases preliminares para un público escogido y vieron que la gente no estaba nada satisfecha con el film. Eso y unido a las quejas de los actores por nula capacidad del director, unos diálogos mal estructurados y una banda sonora inicial que no gustó nada y que hizo Michael Crichton se liase la manta a la cabeza, cambiará al compositor y pusiera en su lugar a Jerry Goldsmith. Por si fuera poco se re-rodaron escenas nuevas incluido el final. Con todo esto no solo alargaron el rodaje de la película con nuevas escenas rodadas y añadidas por otras quitadas (Haciendo que el presupuesto pasase de 85 millones de dólares US a mas de 160 millones de dólares US) y la creación de una nueva banda sonora casi ad hoc, sino que provocaron que el resultado final no tuviera ni de lejos la calidad esperada.
El tema llegó a ser traumático hasta para los actores. Omar Sharif quedo tan traumado, que en 1999 se retiró y rechazo toda clase de papeles hasta que en 2003 le convencieron de actuase en Monsieur Ibrahim (En España se estrenó como El señor Ibrahim y las flores del Corán), haciendo que volviera a coger el gusto por actuar, hasta el momento de su fallecimiento. O que durante un tiempo, se dice, que la mejor forma de quitarle de golpe a Banderas la clásica locuacidad de los malagueños era preguntarle por la película de marras.
Y que clase de detalles fastidiaban a la gente? Por ejemplo, que no se subtitulasen las parte en "escandinavo" en el film al menos en la edición española (Que no entienda ni papa Ahmad no es algo que tenga que afectar a los espectadores, no?), o que ciertos personajes se evaporasen sin mas ni mas, como Wigliff (Anders T. Andersen), el retorcido y pérfido hijo de Hrothgar. O que la parte mas epica del final de la película, en realidad sea una cagada bastante seria (Que guerrero que se aprecie recita una letanía, que no era exactamente así y que supuestamente era ya algo que no se hacía, que ademas era recitada por las esclavas que voluntariamente se unían a su señor en la muerte para servirle en el más allá?):

"He aquí que veo a mi padre, he aquí que veo a mi madre, a mis hermanas y mis hermanos. He aquí que veo el linaje de mi pueblo hasta sus principios. Y he aquí que me llaman, me piden que ocupe mi lugar entre ellos, en los atrios de Valhalla, el lugar donde viven los valientes para siempre". Muy "botito" pero nadie iría diciendo eso. Y no hay que ser especialista en el tema, una vez has leído la novela o usas la cabeza. E ironicamente, es la parte que mas "pone" a la gente.
O que entre los 13 halla un niño (Haltaf, encarnado por Oliver Sveinall). Si fuera Wufgar, todavía se podría entender, pero que guerrero dejaría que un niño ocupase su puesto en tan épica gesta? Aunque total, para lo que hace y dice...es otro de los "desaparecidos". Diálogos sin sentido o sin necesidad en la película. Escenas de acción que están mal hechas, como cuando en el primer combate contra los Wendol se ve que los luchadores en realidad no están más que moviendo las espadas en el vacío y haciendo ruido, no un combate coreografiado como suele ser en las películas. O meterse en unas cuevas con espadas largas. O directamente que no tienen sentido. O convertir a los Wendol, que supuestamente son unos Neardentales, en unos maestros de la guerra psicológica, la infiltración, la lucha ecuestre y las tácticas de batalla (Por no hablar de que habrían exterminado la población de osos de Europa...varias veces, solo para hacerse con sus tocados).O donde se ha visto un árabe tan pulcramente afeitado como Ahmad, cuando eso era signo de eunuco entre los árabes en esa época (Todo cristo se dejaba barba y/o bigote, bien pulcra eso si) Y podría seguir y seguir enumerando, pero tampoco es plan de cebarse.
Una versión "Director's Cut" emendaría algo el tema y podría justificar algunas cosas, pero al menos hasta donde yo se, y he buscado mucho, no hay nada por el estilo de esta pelicula.De hecho, creo que parte del metraje original se eliminó por orden de Michael Crichton.
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Lo que tienes es una peli de acción y aventuras que, entre pitos y flautas, a base de recortes y unir y volve a desunir para volver unir partes del metraje, hace aguas por todas partes y ves hasta normal el disgusto que le dio a varios actores.  A poco que te fijes, ves las grietas y los remiendos, y te quedas mirando mucho rato, la peli se cae a trozos por su propio peso.
Lo que pasa es que la gente se ha quedado con los cuatro detalles épicos de la epopeya vikinga, la fotografía y los paisajes (Muy chulos por cierto) y poco más, lo que ha hecho que casi 20 años más tarde este film tenga una legión de seguidores...que le hubieran venido muy bien en 1999 para evitar el descalabro en taquilla, dicho sea paso.
Es una película mala? No,pero tampoco es buena, siendo honrado. Para pasar el rato y gracias. Cuando eres un adolescente con las hormonas a mil por hora, la peli te parece la hostia, pero pasados unos años, a poco (Muy poco) que leas y aprendas, la ves insulsa, adulterada y sobreactuada, por no hablar de todas las interrogantes que se te plantean. La novela la verdad es un poco insípida, y lo triste es que el autor la hizo así para que pareciera mas bien un informe novelado que otra cosa. Si, eso habla mucho de Ahmad y su honradez y su buen ojo y memoria,pero hace que una novela de casi 300 páginas se te haga larga. En eso la película le aventaja, pero poco más. Ah, por cierto, cuando salio la película, hubo una cierta confusión ya que salieron ediciones con la portada y título del film, pero no eran una versión novelada del film, al menos hasta donde yo se.
Tampoco me hubiera extrañado de que así fuera, porque Crichton es de los que oyen tintinear monedas y dicen "mío", sabiendo colocar sus obras en las productoras para que las haga películas o reciclando partes u obras.
El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble
El Guerrero número Trece y Devoradores de cadáveres, reseña doble

En definitiva, tanto la película como la novela tienen bien ganadas las críticas. Otra cosa es que, con el paso del tiempo y el cambio de gustos o directamente cierta falta de conocimientos  o de pararse un poco a mirar atentamente para ver las incongruencias, a la gente le importe un pimiento y lo que le mole sea la épica desbocada y los momentos grandilocuentes regados con chorretones de sangre y gráficas mutilaciones y evisceraciones. En cuanto a la novela, quizás sirva más bien para interesarse por la obra histórica como tal y no las fantasías de un autor norteamericano.
Bueno, es lo que hay. Es una peli entretenida para una tarde de domingo, pero a partir de cierta edad aconsejo tomarla como el Hákarl: Tragar sin paladear, o atente a las consecuencias...como me ha pasado a mi.
Eso si, se pueden sacar dos o tres ideas buenas para plasmar en una partida de rol, sobre todo en una Runequest...
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