Revista Educación

El hombre, el perro, la cabra y el pajarillo

Por Siempreenmedio @Siempreblog

Hubo un hombre que, al recoger el correo, un lunes tempranito por la mañana, decidió cambiar su vida. Tras leer y romper las cartas de embargo, puso en su mochila un libro, una toalla, una chaqueta y un pequeño cojín y abandonó su casa. Se dirigió a la costa, con su perro y su cabra, Cipriano él, Carmela ella. Buscó una pequeña cueva y la encontró y los tres, pues ya era de noche, se metieron a dormir. Al día siguiente, bien temprano, unos gritos los sacaron del placentero sueño. Dos señores de uniforme le informaron de que no podía pernoctar allí. Y mucho menos con un perro. Al parecer Cipriano tenía que ir atado y con bozal. Sobre la cabra no sabían decirle, lo más probable es que tampoco pudiera estar allí suelta, pero no recordaban muy bien la ordenanza. Y él, por supuesto, tenía que dormir en condiciones. “Pero estás son las condiciones que yo quiero”-contestó el hombre. De nada sirvió, al parecer las personas tienen que vivir como otras personas dicen, aún cuando a nadie molesten. Fue entonces cuando el protagonista de este pequeño cuento de terror vio al pajarillo. Se alegró tanto… Él si era libre… caminaba despacito, tanto que el hombre se acercó mucho a él, tanto como para descubrir que a aquel pobre y diminuto ser también lo habían anillado…

foto de @Perenquen23

foto de @Perenquen23

 


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revista