El hombre en busca de sentido (1946) es uno de esos libros que dejan huella, se puede decir incluso, que pueden llegar a cambiarte la percepción del mundo. Escrito por Viktor Frankl (1905- 1997), afamado neurólogo, psiquiatra y filósofo austriaco, el hombre tuvo la horrible experiencia de ser prisionero en varios campos de concentración desde 1942 a 1945 ( Auschwitz y Dachau) durante el Holocausto y a partir de esa experiencia puedo escribir este libro y los cimientos de lo que sería su escuela, la Logoterapia.
Existen muchos libros contando las atrocidades que vivieron los prisioneros de los campos de concentración, pero este caso es diferente. Está escrito desde la perspectiva clínica, es decir, se centra en responder a la siguiente pregunta: ¿Cómo se veía afectada la psicología del prisionero por el día a día en un campo de concentración? El estilo de la escritura es muy objetivo sin grandes tecnicismos, por lo menos en la primera parte, la cual se divide en tres fases:
1. El informe del prisionero nº 119.104: Contexto general de la horripilante situación
2. Primera fase: Internamiento en el campo: serían las primeras impresiones, las temidas selecciones que determinarían la vida o la muerte, estado de shock, desinfección, macabra curiosidad y desnudez.
3. Segunda fase: La vida en el campo: el día a día, asentamiento, apatía generalizada o muerte emocional, añoranza del hogar y la familia, el hambre, ausencia de sexualidad y sentimientos, huida hacia el interior de uno mismo ("Las personas de mayor sensibilidad, acostumbradas a una activa vida intelectual, posiblemente sufrieran muchísimo, sin embargo, el daño infligido a su ser íntimo fue menor, pues eran capaces de abstraerse del terrible entorno y adentrarse, a través de su espíritu, en un mundo interior más rico y dotado de paz espiritual. Sólo así se explica la aparente paradoja de que los menos fornidos soportaran mejor la vida del campo que los de constitución más robusta"), humor como mecanismo de defensa, tifus, planes de fuga o últimas voluntades aprendidas de memoria para recitar al compañero en caso de muerte.
4. Tercera fase: Después de la liberación: sentimientos de despersonalización, deficiencia moral, amargura y desencanto.
La segunda parte del libro, añadida en una edición posterior, está dedicada a los conceptos básicos de la Logoterapia, y es donde el autor intenta resumir en cuarenta páginas un estudio de veinte volúmenes. Esta parte tiene un lenguaje más técnico pero aún así se puede leer sin dificultad.
Y la tercera parte del libro es un anexo donde encontramos toda la bibliografía del autor.
Pero ¿En qué consiste la Logoterapia de Viktor Frankl? Bien, podemos resumir esta teoría enmarcada dentro del existencialismo en los siguientes puntos:
- Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la libertad humana- la libre elección de la acción personal ante las circunstancias- para elegir el propio camino.
- De modo que cada hombre, incluso en circunstancias trágicas, puede decidir quién quiere ser - espiritual y mentalmente- y conservar su dignidad humana.
- Precisamente esa libertad interior, que nadie puede arrebatar, confiere a la vida intención y sentido.
- La experiencia indica que el sufrimiento es parte sustancial de la vida, como el destino y la muerte. Sin ellos, la existencia quedaría incompleta. La actitud con la que un hombre acepta su destino y el sufrimiento que este conlleva, la forma en que carga con su cruz, comporta la singular coyuntura-incluso en circunstancias muy adversas- de dotar de sentido profundo a su vida. Las circunstancias excepcionalmente adversas otorgan al hombre la oportunidad de crecer espiritualmente más allá de sí mismo.
- La Logoterapia se dirige al futuro, es decir, a los valores y el sentido que el paciente quiere proyectar en el futuro.
- La Logoterapia se centra en el sentido de la existencia humana y en la búsqueda de ese sentido por parte del hombre. Es la lucha por encontrar un sentido a su vida. Este sentido es único y específico, en cuanto es uno mismo quien tiene que encontrarlo.
- El hombre no debería cuestionarse sobre el sentido de la vida, sino comprender que es a él a quien la vida interroga. Sólo con la responsabilidad personal se puede contestar a la vida. De modo que la logoterapia considera que la esencia de la existencia consiste en la capacidad del ser humano para responder responsablemente a las demandas que la vida le plantea en cada situación particular.
- El hombre se determina a sí mismo, no se limita a existir, sino que decide cómo será su existencia, en qué se convertirá en el próximo minuto.
La lectura de este tipo de libros siempre impacta, y más si versa sobre un acontecimiento tan inhumano como lo fue el Holocausto. Creo que, a pesar de que duela, no debemos olvidar este episodio que ya forma parte de la memoria histórica. Por otra parte, me da la sensación de que las nuevas generaciones se perciben demasiado lejos del suceso como para tener cierta empatía o conciencia. Es más, en estos convulsos tiempos dignos de un estudio sociológico, el totalitarismo puede verse de una manera romántica y atractiva para los más jóvenes, haciendo que poco a poco resurja este modo de gobierno que tanto daño ha hecho a la humanidad.
El hombre en busca de sentido es un libro que hay que leer con un lápiz y libreta en mano, para apuntar todas aquellas frases y conceptos que nos llaman la atención, que en mi caso han sido muchos. Hay varias páginas webs del autor y su doctrina que merecen la pena ser visitadas como esta en español y otra en alemán e inglés y es la oficial.Puedes comprar el libro pinchando en el siguiente enlace:Hombre En Busca de sentidoRecomiendo esta lectura a los lectores que se decanten por los libros basados en hechos reales, de temática de desarrollo personal, filosófica o histórica.Yo por mi parte, voy a empezar a poner en práctica el postulado básico de la Logoterapia:
"Entre el estímulo y la respuesta, el ser humano tiene la libertad interior de elegir"